El Consejo de Ecología y Medio Ambiente (CODEMA) descartó falencias en la remediación del sitio Ñirihuau, cercano al arroyo Las Minas, donde emanan hidrocarburos. Meses atrás ADN estuvo en el lugar y constató la filtración de petróleo a las aguas del arroyo.
En respuesta a un pedido de informes de la Legislatura el CODEMA aseguró que en la zona afectada del arroyo Las Minas donde se realizaron tareas de saneamiento y remediación “se llevaron a cabo numerosas inspecciones y controles que determinaron que los trabajos efectuados están cumpliendo con los objetivos propuestos”.
Remarcó el CODEMA que las concentraciones de hidrocarburos detectadas, “resultan inferiores en todos los casos a las 5 partes por millón establecidas por la legislación provincial como límite permitido para el vertido de efluentes”.
En octubre pasado un informe de ADN y Patagonia Foto Press reflejó la situación de la zona de Ñirihuau donde existen manaderos de hidrocarburos naturales e inducidos (por exploraciones de varias décadas atrás), que a pesar de las tareas de contención realizadas con la instalación de tanques de almacenamiento de hidrocarburos, tuberías y contención de piedras y nylon, el petróleo sigue manando y filtrándose hacia el arroyo, el gas silbando y creando "burbujas" con el líquido que corre sobre la superficie terrestre, y existen manchones de sólida brea.
En su momento el delegado local del Departamento Provincial de Aguas, Gabriel Sorá, detalló las tareas realizadas y reconoció que restaba otra etapa y también fallas en la contención realizada por efectos climáticos como lluvias.
Ahora el CODEMA en su informe describió el plan de contención primaria y saneamiento de manaderos en la cuenca del Ñirihuau y las tareas de saneamiento y remediación en el arroyo Las Minas.
Detalló que la zona afectada se dividió en cuatro sitios, “para aplicar diferentes estrategias operativas de saneamiento y control de futuros eventos contaminantes” y las tareas fueron realizadas de acuerdo al estudio de la consultora ambiental GEOciencia SRL, conjuntamente con el DPA.
Describe las tareas realizadas con la extracción del hidrocarburo líquido en bidones, el retiro de residuos del interior de un pozo, el cual luego se cerró para “asegurar el venteo de los gases que libera el pozo en forma continua”.
Indicó además que “se observó un afloramiento del nivel freático en el cual el agua fluye naturalmente debajo de las rocas y moviliza el hidrocarburo en suspensión hacia el arroyo Las Minas, por lo que se realizó un sistema de captación y canalización para que el hidrocarburo no retenido se dirija a un tanque”.
En tiempo futuro señaló que en el sitio 4 “se procederá a la limpieza de los suelos superficiales; se cercarán los manaderos con un tanque; se retirarán los suelos contaminados y se cerrarán con un dique de piedra las conexiones con el arroyo”.
En octubre bajo el título “Ñirihuau hoy: Contención a medias de manaderos de petróleo”, este medio denunció la situación del sitio –en el establecimiento La Lucha- donde la Compañía Minera Chileno-Argentina exploró el subsuelo en 1916, luego en los años `30 hizo lo propia YPF y en 1984 estuvo en manos de la petrolera ESSO.
Esa zona había sido incluida en un primer momento dentro del área de exploración que la Provincia licitó en 2008, pero ante la demanda de vecinos y organizaciones ambientales por su remediación, fue excluido del área que se adjudicó a la UTE YPF- Pluspetrol, al igual que todo el territorio que comprendía al Parque Nacional Nahuel Huapi.