La época de lluvia en 2009 más deficitaria de la última década y la previsión de un verano más seco este año advierten sobre un eventual desabastecimiento de agua aquí, afirma hoy la prensa.
El diario Siglo Veintiuno ofrece opiniones de varios expertos, quienes se refieren a las afectaciones por la conjugación de esos factores a los mantos acuíferos de toda Guatemala, pero especialmente los ubicados en el área metropolitana de esta capital.
Uno de los especialistas del Instituto Nacional de Sismología, Vulcanología, Meteorología e Hidrología señala que pudiera calificarse esa situación como un nivel de alerta amarillo.
Ello implica, añade, ciertas restricciones, precauciones, y una mejor administración de la explotación del recurso hídrico subterráneo.
La estación lluviosa anterior no permitió la adecuada recarga de los mantos acuíferos y, por ejemplo, el valle de la ciudad de Guatemala enfrenta un déficit de precipitación pluvial de 15 a 20 por ciento en diferentes puntos, según el funcionario.
Además, muchas de sus fuentes superficiales y subterráneas se secaron como consecuencia de la explosión demográfica.
A ello se suman pronósticos de tener en este verano las temperaturas más altas en 10 años y que será extremadamente seco, por lo cual la municipalidad labora en la habilitación de más pozos y un mejor mantenimiento a los existentes.