El intendente, durante una entrevista con El Diario, afirmó que la situación de caos en algunos puntos de la ciudad “desnuda el grado de irresponsabilidad en la instalación de algunos barrios en lugares deprimidos o bajos, lo cual hoy significa tener que hacer obras caras para salvar situaciones como las que estamos atravesando”.
Además de describir el penoso panorama en los lugares que peor la pasaron (ver aparte), el intendente dijo que dentro de todo estaba “conforme porque distintos actores pudimos coordinar un trabajo para el que no estábamos preparados. Nunca nadie imaginó una lluvia de estas características. Con la CPE, Defensa Civil, Vialidad, el Ministerio de Bienestar Social, estuvimos como hasta la una y media o dos en mi despacho, recorriendo hasta las cuatro de la madrugada la ciudad con la Policía, y encontramos mucha gente solidaria, ofreciendo camiones y camionetas para evacuar. La realidad es que esta ciudad no soporta más de 50 ó 60 milímetros. Esto fue inesperado”.
- ¿Se pensó en la posibilidad de subsidiar de algún modo a los más afectados? ¿Eso se conversó con el gobernador? -preguntó El Diario.
- El gobernador dijo que tendríamos lo que necesitáramos... vamos a hacer un relevamiento, para ayudar en la medida de lo posible a la gente, sobre todo a la más necesitada. No es un tema que se haya charlado puntualmente con el gobernador. Ahora viene la etapa de la reconstrucción. Porque hay calles de tierra totalmente destruidas, pavimento también, hacen falta muchos recursos. Trataremos de ir resolviendo los problemas. Lo importante es que no hay víctimas; que hubo un importante nivel de solidaridad y se tomó con calma un fenómeno extraordinario.

Víctimas
Respecto de los problemas de infraestructura, apuntó: “Yo miro para adelante. Nuestro plan estratégico prevé un estudio acabado del tema pluviales, agua y cloacas, un plan directriz de obras. Porque está colapsado. Los desagües de la Santa Cruz son imprescindibles, es todo el sistema de la zona noroeste, es una inversión imprescindible. Toman de la rotonda del avión para abajo. Son imprescindibles, insisto. Ahora vamos a juntar mucha agua en la laguna, que lo estamos haciendo, pero el transporte del agua va a ser diferente”.
Destacó que la obra de desagües de la calle Chile “funcionó”.
Sobre la laguna contó que “le habíamos bajado 40 centímetros y eso significó actualizar el sistema de bombeo, pues no había tableros y había sido abandonada esa situación. Habíamos bajado 40 centímetros, pero entre las tres de la tarde y la medianoche del lunes el nivel de la laguna subió 95 centímetros, entonces, profundizamos el cuenco norte. Anoche (por el lunes) subió 5 centímetros más. Ahora se está aliviando el cuenco norte, estamos tirando agua al Bajo Giuliani y estimamos poder bajar unos 25 ó 30 centímetros, con lo cual tendríamos unos 70 centímetros para absorber agua e incorporar unos 150 milímetros más. Pero la laguna está al borde. Es un tema que en algún momento hay que resolver... (Oscar Mario) Jorge cuando era intendente se lo había planteado a (Rubén) Marín como gobernador: hay que agregar otro sistema de bombeo que salga por el parque industrial y por el canal al Bajo Giuliani. Ya me lo había comentado y ahora surgió nuevamente como alternativa”.
Torroba insistió en que “esto ha sido un fenómeno no habitual, que no ha costado víctimas pero pudo haber habido algunas fatales; eso es importante porque lo otro es recuperable. Hay que hacer ese replanteo en cuanto a algunas obras de infraestructura que son de necesidad imperiosa. Porque Santa Rosa crece y ha incrementado sustancialmente la superficie cubierta”.
Puso algunos ejemplos, como el Barrio Obreros de la Construcción, que desagota sobre el cuenco del Malvinas Argentinas: “Es una gran superficie cubierta, En esa zona iba a haber quintas, y una cosa es que haya seis propiedades por manzana y otra veinticinco. A futuro hay que prever esas obras. Los pluviales funcionaron dentro de lo previsto. Si llovían 50 ó 60 no había dificultades, pero arriba de eso...”