La Unidad Reguladora de Servicios de Energía y Agua (Ursea) consideró que "no existen observaciones significativas" en relación al ajuste tarifario de 5,8% que aplicó OSE el pasado 1º de febrero.
No obstante, el organismo advierte que del total de la tasa de ajuste (5,8%), un 3,69% corresponde a la posición financiera de la empresa. Por ese motivo, el organismo recomienda en posteriores ajustes "la coordinación" de una instancia donde se "especifique" la metodología e hipótesis de elaboración del programa financiero que se utiliza para calcular el ajuste de las tarifas.
Para 2010, OSE estimó una caída del tipo de cambio de 9,63% en respecto al año pasado, 4,04% de inflación y un ajuste de salarios para sus funcionarios de 6,97%.
También la Ursea solicita al ente que proporcione una "fundamentación" acerca del plan de inversiones de la empresa junto con un cronograma de desembolso de las mismas.
Por otro lado, el organismo destaca de la nueva estructura tarifaria de OSE para 2010 una "mayor claridad" en cómo se encuentran clasificados los clientes con diferentes patrones de consumo en los servicios de agua potable y saneamiento, así como los situados en distintas zonas geográficas.
En ese sentido, quedan definidos con "mayor detalle y claridad" cuales son los cargos fijos y variables a pagar en cada categoría tarifaria, así como los otros tipos de cargo y precios que deben abonar los clientes por el usufructo de los servicios de agua potable y saneamiento.
Asimismo, en el ajuste que rige desde febrero OSE agregó una tarifa rural y colectiva, en el marco de la meta de abastecimiento de agua potable a pequeñas localidades y escuelas rurales.
Para la Ursea esta iniciativa contribuye "a la inclusión social" y a la "universalización" del servicio de agua potable que brinda la empresa estatal.