A poco más de seis meses de las elecciones que definirán a su sucesor, el presidente de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva, anunció ayer inversiones por más de 833 mil millones de dólares en proyectos de infraestructura y viviendas a realizarse a partir de 2011, cuando se iniciará el futuro gobierno y que será ejecutado por los próximos dos gobiernos.
El anuncio del nuevo plan, durante una ceremonia en Brasilia en la que intervino la ministra del Gabinete Civil, Dilma Rousseff –la candidata de Lula a los comicios presidenciales de octubre–, junto con ministros, gobernadores y alcaldes, ocurrió en momentos en que, según la organización no gubernamental Cuentas Abiertas, todavía ni siquiera se ha iniciado más de la mitad de las obras previstas en el Programa de Aceleración del Crecimiento (PAC), lanzado en 2007.
“Dinero no falta”, aseguró el mandatario. Se trata de la segunda etapa del Plan de Aceleración del Crecimiento (PAC) que Lula anunció en enero de 2007, días después de haber asumido su segundo mandato consecutivo, que vencerá el 1º de enero próximo.
Al revelar los objetivos de la segunda etapa de ese proyecto –bautizado PAC II–, Lula reconoció que muchos de los proyectos del primer PAC “no tuvieron lugar”, lo que atribuyó a trabas burocráticas y a la demora en la presentación de los proyectos por parte de alcaldes, gobernadores y ministros. “Yo no estoy contento por lo que hicimos hasta ahora, y creo que ninguno de ustedes está contento. Tenemos la obligación de hacer más. El pueblo pobre de este país necesita que hagamos más, la economía lo necesita”, expresó Lula, al justificar el anuncio del PAC II en el último año de su segundo mandato.
El PAC II constará de dos etapas. La primera, a lo largo del mandato del presidente a ser elegido en las urnas de octubre (2011-2014), involucrará proyectos por un costo global de unos 532 mil millones de dólares; y la segunda, a realizarse a partir de 2014, comprenderá inversiones por 300 mil millones. El PAC I contempló proyectos por 250 mil millones de dólares, de los cuales se ejecutaron dos tercios, según el gobierno.
El nuevo proyecto prevé que serán invertidos –entre capitales estatales y privados– unos 532 mil millones de dólares, especialmente en las áreas de energía, construcción de viviendas populares y saneamiento básico. Un 68,68 por ciento de las inversiones del PAC II será destinado al sector energético: tan sólo la explotación de los gigantescos yacimientos de petróleo y gas ubicados en aguas ultraprofundas de la capa presal de la plataforma continental brasileña consumirá casi 70 mil millones de dólares, de los cuales unos 36 mil millones se gastarán entre 2011 y 2014.
“Aprendimos que destinar dinero para los proyectos es fácil, pero para la ejecución hay que romper diversas barreras”, afirmó Lula, quien remarcó que sentía la “obligación” de legar ese programa a sus sucesores. “Este PAC II no es de Lula; a mí me quedan nueve meses en el gobierno y queremos que sea para quien venga a gobernar”, dijo el mandatario, y agregó que las inversiones gubernamentales deben ser “un compromiso del Estado” sin importar la orientación política del próximo presidente.
Del presupuesto total del PAC II se destinarán a proyectos energéticos unos 490 mil millones de dólares, de los cuales un 80 por ciento será absorbido por la petrolera mixta con dirección estatal Petrobras. Otro segmento será asignado a la construcción de usinas hidroeléctricas en los ríos Madera y Xingún, en los estados (provincias) de Rondonia y Pará, respectivamente, ambos en la región amazónica.
Por otra parte, habrá 90 mil millones de dólares destinados a planes de viviendas y urbanización de favelas (villas de emergencia). Rousseff remarcó que entre 2007 y fines de este año el gobierno habrá construido un millón de viviendas en el programa Mi Casa, Mi Vida, y añadió que con la segunda etapa de ese programa, a partir de 2011, se levantarán otras dos millones, de las cuales el 60 por ciento será para familias cuyos ingresos sean inferiores a tres salarios mínimos.
Según el ministro de Hacienda, Guido Mantega, el 60 por ciento del total de inversiones previstas en el PAC II, que se concretará entre 2011 y 2014, asegurará para el país el mantenimiento de un crecimiento económico promedio del 5,5 por ciento anual en ese período. “Estaremos entre los países con las más grandes tasas de crecimiento del mundo en ese período”, afirmó Mantega.