En barrio José Hernández, por ejemplo, no había agua ni para beber porque los vecinos no tienen cisterna. “Entre las 10 y las 12 del mediodía (de hoy) se reanudará el servicio”, dijo el subsecretario de Saneamiento, Juan José Moreno, en diálogo con EL DIARIO.
Sucede que la rotura se detectó ayer a la mañana, en López Jordán y Circunvalación, y luego de que se destapó y se vació el tanque, se empezó a trabajar alrededor de las 16 horas. El caño se iba a laminar recién después de las 20. Luego, se iban a precisar 8 horas para fraguar el arreglo, más dos horas para volver a llenar el caño con el fin de reanudar el bombeo desde la planta nueva a los centros de distribución, desde donde recién después enviarían agua a los barrios afectados.
Oficialmente, se informó anoche que los vecinos afectados estaban dentro del perímetro comprendido entre avenida Ramírez (límite Este), río Paraná (Norte), avenida de Las Américas (Sur), y Circunvalación y final del ejido. Entre otros, se quedaron sin agua los barrios Seminario, Policial, Lomas del Mirador, Vairetti y 82 Viviendas, Paraná XIV, AATRA, y José Hernández.

“SERVICIO POS VENTA”. El caño que se rompió es el de 900 milímetros. que alimenta desde la planta potabilizadora, a dos centros de distribución: Lola Mora y Parque del Lago, los cuales vuelven a bombear agua a los barrios. Ayer a la tarde se había activado el llamado “bombeo chico” para los alrededores de la nueva potabilizadora, barrios Lomas del Golf y casas americanas, entre otras zonas, y se estaba tratando de atender lo que se podía desde la planta de Ramírez.
Este caño es el mismo que se rompió días atrás a la salida de la planta, y por culpa del cual estuvieron cerradas las instalaciones durante tres meses en 2008. Ese año, se ocupó de recorrer las cañerías nuevas y repararlas el fabricante de los caños, Petroplast, pues la planta estaba en garantía aún. Hoy ya no está en garantía, pero los operarios de la firma vinieron igual “como un servicio pos venta”, dijo Moreno. La Comuna los llamó temprano en la mañana de ayer y la cuadrilla llegó cerca de las 16 desde Buenos Aires, “donde están haciendo un trabajo”, explicó el funcionario, pues la firma es de Mendoza. “Se ofrecieron a hacerlo como un servicio pos venta: sus operarios son más calificados que los nuestros para realizar el trabajo. Nosotros le descubrimos el caño y lo vaciamos. Ellos llegaron desde Buenos Aires con el material, la resina e hicieron el laminado con plástico reforzado con fibra de vidrio, el mismo material con la que está construida la cañería”.
“Se hizo un trabajo similar a la salida de la planta (en 2008) y hasta ahora afortunadamente no hubo que volver a intervenir”, dijo Moreno. Justamente, a raíz de las reiteradas roturas en los nuevos caños de fibra de vidrio, las autoridades comunales decidieron hacer una conexión de emergencia entre la planta nueva y la vieja de calle Ramírez, para enviar agua hacia el Cristo y que ésta se encargue de redistribuir, con el fin de que el impacto en la ciudad de desgracias como la de ayer no sea tan profundo.