Desde la oposición, el senador nacionalista Luis Alberto Lacalle afirmó ayer que la "Unasur todavía no existe como tal" y que "todavía es un proyecto".
Por este motivo, dijo el ex presidente a Radio El Espectador que "no deja de ser una tarea de hipótesis" designar a su secretario general, aludiendo al nombramiento del argentino Néstor Kirchner.
Asimismo, Lacalle consideró que antes de definir una posición Uruguay debería ratificar la creación de la Unasur, que hasta el momento sólo fue apoyada por tres países cuando en el estatuto se indica que debe ser ratificado por nueve.
"La Unasur no es más que un proyecto político que tiene voluntad política pero que no existe jurídicamente porque aún no fue ratificado por nueve naciones. Sólo tres lo hicieron y ni siquiera Uruguay la apoyó", explicó el ex mandatario a Observa.
Lacalle agregó que luego de la reunión de Mujica con la presidenta argentina, Cristina Fernández, habló con el mandatario uruguayo sobre el conflicto binacional con ese país. El presidente del Directorio del Partido Nacional destacó que el gobierno uruguayo debería darle empuje a la navegación del río Uruguay, repotenciar la represa de Salto Grande y avanzar en el dragado (del canal Martín García), que facilitaría la navegación. "Se debe convertir al río en una gran solución, en un punto de unión y no de discordia", dijo.
Al respecto, recordemos que la semana pasada Lacalle realizó una exposición escrita en el Senado referente al desarrollo del río Uruguay y que pretende ser un insumo para la solución al diferendo con el vecino país.
El ex mandatario indicó además que la "política exterior es tema del Presidente y del canciller", y consideró que se está llevando adelante "de la mejor manera".

"Vergonzoso"
Por su parte, en una carta enviada al presidente Mujica a mediados de la semana pasada, el legislador de Alianza Nacional Javier García estimó que el voto a Kirchner sería un acto "vergonzoso" que afectaría la unidad del sistema político uruguayo, consagrada a partir del corte de los puentes internacionales, y además sería "una afrenta" al pueblo uruguayo.