El motivo fueron los fuertes olores que se percibían en la zona a pesar de que las obras en ese sector ya están terminadas. Se trata de la primera intimación que la entidad recibe por ese motivo y, según las autoridades de OSSE, el problema ya está solucionado.
Según el director de Gestión Ambiental, José Luis Espinoza, el olor era producto de la combustión de los gases de los líquidos cloacales. El problema fue detectado la semana pasada por los técnicos ambientales que están controlando la obra, que descubrieron que el olor emanaba de un respiradero de las cloacas que está ubicado en el bulevar de la intersección de Alem y San Luis. La solución era poner un filtro y obligaron a OSSE a realizar la tarea.
Según las autoridades de Obras Sanitarias, la medida ya fue acatada. Lo que hicieron fue poner un sombrerete de carbón activado, que es el nombre técnico que tiene el filtro que se usa para eliminar los olores que emanan las cloacas. Este dispositivo se coloca en el interior del respiradero antes de la boca de salida. Hasta ahora es el único filtro que han colocado. "Estamos al tanto de que en las inmediaciones de Avenida Rioja y San Luis y de Avenida Rawson y San Luis (que es donde también hay respiraderos) también se sienten olores, pero ahí no hará falta filtro porque eso se solucionará cuando hagamos la interconexión de las nuevas cañerías de calle San Luis con las existentes que hay en la avenida", dijo el presidente de OSSE, Adrián Cuevas.
Por su parte, Espinoza dijo que esta es la primera vez que realizan una intimación de este tipo por las obras cloacales. "Estamos haciendo inspecciones en todos los frentes de trabajo y, en general, están trabajando de acuerdo a las normas ambientales a pesar de los imprevistos que van encontrando en cada sector, como los problemas de humedad", comentó Espinoza. De todos modos, el funcionario dijo que dentro de un par de semanas saldrán nuevamente a controlar todos los tramos del trabajo y también si han colocado el filtro.