La estatización de Obras Sanitarias cuenta con el aval de los partidos de la oposición con representación legislativa. El gobernador Celso Jaque logró el compromiso de trabajo consensuado para avanzar en el proceso de retorno al Estado de la empresa de aguas y saneamiento, un tema en el que todos, a priori, tienen una postura favorable, aunque con matices.
Jaque hizo el primer acercamiento con la oposición durante una reunión realizada en el cuarto piso de Casa de Gobierno, en la que estuvieron presentes el senador y presidente de la UCR, César Biffi; los diputados Andrés Marín (Confe), Ricardo Puga (Proyecto Independiente Mendoza), Néstor Piedrafita (ARI), Jorge Tanús (PJ), y el vicepresidente del PD, Andrés Grau.
Durante más de tres horas, los asistentes al convite del Gobernador intercambiaron ideas y solicitaron mayor información acerca del estado de situación de la empresa intervenida, para volver a reunirse en la tarde del jueves que viene, con la intención de abordar una discusión más técnica que dé sustento a la unánime voluntad política de las partes.
De acuerdo con lo que los protagonistas relataron, el Ejecutivo no tiene cerrada la forma legal de la futura empresa estatal. Al respecto, refirieron que Jaque les habría dicho que está abierto a cualquier escenario jurídico, siempre y cuando se garantice la mayoría accionaria y el control de la operación.
A su turno, cada uno de los invitados hizo gala de un amplio consenso con la iniciativa, haciendo particular énfasis en priorizar la rentabilidad social que implica un servicio eficiente de aguas y cloacas.
Las preguntas que quedaron en el tintero se refieren a las consecuencias de la finalización del contrato, particularmente las causas para quitar el servicio a los concesionarios, las que deben ser lo suficientemente sólidas como para sortear cualquier embate judicial contra la Provincia.
Otro de los temas a discutir es la participación de privados en OSM. Hay acuerdo en que participen de la propiedad de la empresa sus empleados en un 10% del paquete accionario (promesa realizada por Jaque a los trabajadores de OSM durante una reunión realizada en la mañana de ayer en la sede de la empresa), pero quedan dudas en la oposición respecto de la participación de empresas.
Todos, a su turno, plantearon dudas, por la situación actual de la compañía, en la que es dudosa la ganancia, teniendo en cuenta la reinversión necesaria para recuperar el terreno perdido en obras que permitan cumplir con el servicio a los usuarios actuales y garantizarlo para el futuro.
Al respecto, Biffi dijo que "no es imposible que el Estado preste un servicio de calidad", siempre y cuando no se repitan los errores del pasado, idea que fue reiterada por Grau.
Por ahora no hay números finos acerca de la inversión necesaria para poder ofrecer un servicio de calidad, números que deberá proveer el EPAS y la intervención de OSM, a la oposición, en los próximos días. Sin embargo, Tanús adelantó que habría que reinvertir el producido de la empresa durante los próximos cinco años para recuperar la infraestructura.
Un punto que también ha sido incluido en la agenda del debate, en el que insistieron ante la prensa Puga y Marín, fue la futura composición del EPAS dado que, al cambiar el status jurídico de OSM, el Estado sería el prestador y el controlador de los servicios.
Por último, Tanús anunció que podrían ser absorbidas, en el futuro esquema de OSM, las empresas cooperativas y municipales que prestan el suministro a varias comunidades de la provincia.

Reunión con los empleados
Celso Jaque destinó la jornada de ayer a la tarea de sumar voluntades para lograr la estatización de OSM en el plazo de 60 días que comprometió (aunque al parecer de muchos será escaso). Además de su reunión con la oposición, el Gobernador llegó al mediodía a la sede de la empresa, para encontrarse con el personal.
Allí, Jaque prometió mantener el 10% del paquete accionario en el Programa de Propiedad Participada (PPP) en manos de los trabajadores.

Foto: Archivo Programa Infoagua