El gobernador Celso Jaque aseguró que la planta de tratamiento de residuos cloacales que proyectan construir en La Primavera no contaminará ni generará malos olores. Los vecinos se oponen, y adelantaron que harán movilizaciones y, de ser necesario, recurrirán a la Justicia. El tema será tratado el próximo 21 en audiencia pública.
Luego de inaugurar la escuela técnica Colonia Las Rosas, el gobernador dijo que los vecinos tienen que entender que la obra cloacal “no es contra nadie” y destacó que la tecnología con la que contará “no es la que se utilizaba años atrás”.
“No quisiera caer en una discusión sectorial o partidaria que implique privarnos del futuro. En el Valle de Uco, todo el mundo habla de preservar el medio ambiente, y si alguien no entiende que sin cloacas lo ponemos en riesgo, entonces no es cierto que les interese el medio ambiente”, dijo Jaque.

Se viene la audiencia pública
Sobre si la sociedad decide en la audiencia pública que no se construya la planta, subrayó: “No me sentiré bien, pero no podrán decir que este gobernador no quiso resolver el problema que tiene Vista Flores con los pozos sépticos”.
En tanto, el pasado viernes, unos 25 vecinos de La Primavera mantuvieron una reunión en la que reforzaron su negativa a la planta y diagramaron los pasos a seguir en su lucha.
En La Primavera residen poco más de 300 familias.
Los vecinos argumentaron que “se trata de un proyecto ridículo” que no los integra, sino que “lo único que busca es convertir el lugar en la cloaca del departamento”.
“Si la planta no contamina, ¿por qué no la construyen en Vista Flores?”, se preguntó una vecina.

Detalles
En base al croquis trazado, los efluentes cloacales de Vista Flores y, en el futuro, de Colonia Las Rosas serán volcados en una red domiciliaria que los llevará a través de un colector entubado hasta los rodillos aireadores.
Desde allí, el material desembocará en una pileta cerrada y la disposición final –el agua clorada– será utilizada para regar un bosque de álamos que se levantará en la periferia del cuadro donde proyectan ubicarla.
Los pobladores del lugar rechazan el proyecto y esgrimen varios argumentos. Entre ellos se destaca la característica de la zona de poseer la napa freática a escasos 50 centímetros de la superficie, según aseguran. “Sí o sí habrá contaminación”, sentenciaron.