El doctor Ernesto Viglizzo, investigador de la Estación Experimental Agropecuaria INTA Anguil, coordinador nacional del área Gestión Ambiental del organismo a nivel nacional, fue quien elaboró los fundamentos de la primera jornada que se hace en La Pampa, que tratará como tema específico la gestión del agua en los sistemas productivos.
El evento se denomina "Gestión del agua en el agro pampeano: Entre el exceso y la escasez", y parte de numerosos dilemas que tratará de resolver en su transcurso.
¿Podemos predecir qué ocurrirá con las lluvias en nuestra región? ¿Estamos ingresando en una fase más seca que la de los años 70, 80, 90? ¿Si los ciclos existen, hay factores que puedan explicarlos y que permitan adaptarnos a futuro? ¿Las napas son predecibles y manejables? Estas son algunas de las preguntas que los disertantes del encuentro tratarán de responder.
Según prometió Viglizzo a La Arena del Campo, habrá conceptos, ideas y conocimientos novedosos que se llevarán productores y técnicos que participen del evento. "Yo voy a presentar cosas que nunca fueron presentadas hasta ahora, son producto de investigaciones ni están publicadas tampoco", dijo.
El engranaje.
La charla que brindará el propio investigador se referirá a ciclos de inundaciones y sequías, analizando el pasado como materia prima para interpretar el futuro.
"Quizás entremos en un período más seco en toda esta región semiárida argentina o diagonal semiárida que termina en Jujuy si se quiere, y probablemente eso nos lleve a replantear algunas cosas. Hemos pasado por estas situaciones en las décadas del 30 y del 40, y de eso tenemos registros. En aquella oportunidad nos sorprendió porque no supimos cambiar a tiempo los sistemas de producción. Ahora estamos en mejores condiciones, más preparados, y probablemente haya que hacer algunos replanteos. Uno poco la conclusión de lo que yo voy a explicar, es que quizás en los próximos años no va a ser ni la suplementación, ni la carga animal, ni el manejo de la pastura, quizás sea la gestión del agua el engranaje motriz de todo el sistema".
-¿El tema del agua es central a partir de ahora?
E.V.: -Por defecto. Si hablamos de los últimos cinco o seis últimos años, faltó agua, entonces empieza a ser el elemento limitante, con lo cual tenés que trabajar todo el sistema en función de ese elemento que está limitando. Hoy tenemos muchos más conocimientos, entonces tenemos que prepararnos con un paradigma productivo en el cual el agua sea la que module todo el sistema productivo.
Huella ecológica.
Las investigaciones actuales de Viglizzo se concentran en el análisis de la variabilidad climática regional, y cómo ésta modela el sistema de producción. Sin ser climatólogo ni meteorólogo, -cosa que él aclara-, utiliza el clima como insumo para analizar de qué forma puede afectar al sistema de producción a partir de lo que denominan "huella ecológica de la agricultura".
"Es un poco, a través de indicadores, -un trabajo que estamos cercanos a publicar, un pequeño libro junto con el investigador Esteban Jobbágy-, analizar en estos cincuenta años de agricultura que hemos tenido en el país, qué huella ecológica ha ido dejando la agricultura sobre algunos indicadores como balances de fósforo, minerales, emisiones de gases invernadero, sobre una cantidad de variables como usos de energía, plaguicidas y su impacto sobre el ambiente, y están surgiendo algunas conclusiones bastante interesantes".
-Hay voces de alerta por la sojización. El INTA propone que se vaya a la ganadería, pero por una cuestión de rentabilidad, el productor elige la agricultura. ¿Qué opinión tiene al respecto?
E.V.: -Es bastante complejo el problema. Yo creo que ningún gobierno de los que he conocido se ha mostrado particularmente sensible a la problemática ambiental. Recién en los últimos 20 años se empiezan a plantear estos temas, desde el INTA particularmente y después se van adhiriendo otras instituciones públicas y privadas. El INTA pasa por ciclos, depende del Ministerio de Agricultura, y a veces hay ministros o secretarios que bajan líneas muy fuertes, y hay otros que dejan más libertad académica y científica. En estos momentos, creo que estamos ante una situación de directivas fuertes, lo cual contribuye a diseñar los sistemas de producción. Si la agricultura en un momento dado es una fuente de recursos importante para el Estado, bueno primero la agricultura y después vemos las secuelas que deja.
-¿Esa sería la actual directiva?
E.V.: -Y sí, yo creo que la actual directiva apunta a la intensificación de los sistemas de producción. Y la agricultura, si bien la agricultura sojera fue en algún momento un poco satanizada, hoy ya no lo es tanto porque ya no se puede negar que es una fuente de recursos fiscales para el Estado demasiado importante como para ignorarlo, entonces bueno, miramos para otro lado y dejemos que vaya.
Andrea M. D'Atri
Redacción de La Arena.
QUIROGA: "LA SOCIEDAD ESTA PREOCUPADA POR LA DEGRADACIÓN DE RECURSOS".
Gestión del agua y cuidado del suelo
Alberto Quiroga brindó una exposición que él mismo denominó "La gestión del agua en producciones de secano, lo viejo, lo nuevo o lo de siempre". El profesional se refirió a la realidad actual del productor pampeano, la importancia del recurso suelo, y el papel activo que debe jugar la sociedad al respecto.
Alberto Quiroga se recibió de ingeniero agrónomo en la UNLPam en el año 1980. Más tarde, se incorporó como docente a la cátedra de Hidrología y realizó sus estudios de posgrado y doctorado, dentro de la especialidad de manejo de suelos, en la ciudad de Bahía Blanca. Desde el año 1988 trabaja en el INTA Anguil, institución desde la cual ha venido desarrollando su labor en el manejo del agua en los sistemas de producción.
El pasado 23 de abril tuvo a su cargo una charla en la Facultad de Agronomía de la Universidad Nacional de La Pampa, en la cual explicó los aspectos más importantes de su área de especialización, y la incidencia fundamental que tiene la gestión del agua para los productores de nuestra región. Durante el transcurso, definió algunos conceptos teóricos, dio argumentos sobre porqué hacer un uso eficiente y gestionado del agua, y habló sobre las actividades que están realizando con varios grupos de trabajo en diversos lugares del país, como Lincoln, Santa Fe, Villegas y La Pampa.
Quiroga dijo que realizan estas experiencias para que las generaciones más jóvenes de estudiantes que se están formando con ellos, no se queden detenidos sólo en el estudio del "sistema poroso", sino que también tomen conciencia de que hay urgencias que necesitan ser resueltas.
Una vez finalizada la charla, Quiroga detalló a La Arena del Campo la situación de los productores de esta provincia , los conocimientos que poseen sobre la aplicación eficaz del agua, y el cambio de perspectiva que debe adquirir la sociedad en relación al uso indiscriminado de estos recursos.
-¿Cómo puede caracterizar al recurso agua en la producción agropecuaria de La Pampa?
A.Q.: -La gestión del agua dentro de lo que es la provincia de La Pampa es clave porque estamos en una zona semiárida, y esto implica que el requerimiento de los cultivos no es cubierto por las precipitaciones, por lo tanto, esa agua que falta el productor la debe gestionar antes de la siembra de un cultivo, a través del barbecho, de los sistemas de labranza. Debe manejar parte del agua tratando de llegar al momento de la siembra de los cultivos con una reserva importante en el suelo, para que de esa manera, el cultivo tenga menos riesgos, o una mayor probabilidad de tener una buena cosecha o una buena producción de pastos. De eso se trata gran parte del rendimiento de los cultivos o de la producción de forrajes de los cultivos, se define no durante el ciclo, sino antes que el productor siembre.
-¿Qué evaluación hace del conocimiento de los productores de la región para eficientizar el uso del agua?
A.Q.: -El productor de la región semiárida es consciente de este problema y de las limitantes que esto le significa a su sistema de producción, de ahí que es un productor que no solamente gestiona el agua para un cultivo, sino que a su vez gestiona, por ejemplo, las reservas de forraje para lo que es la ganadería. Es un productor que sabe que debe planificar su sistema de producción teniendo en cuenta que va a afrontar riesgos de falta de agua o de precipitaciones. El productor de la zona central de nuestra provincia, a diferencia de otros productores que habitan en regiones más húmedas, es alguien que no sabe lo que quiere hacer. Es decir, medianamente tiene una idea, un plan de lo que quiere realizar, pero en función del clima, de cómo se viene dando el año, muchas veces, tiene que cambiar y terminar haciendo lo que no tenía en mente. Debe tener mucho criterio y conocimiento como para poder cambiar las estrategias sobre la marcha según la situación, no sólo climática, sino también la situación del mercado, la situación financiera. Tiene que estar elaborando permanentemente estrategias de producción y estar controlando o cambiando decisiones que hasta hace poco pensaba que eran seguras.
-¿Desde el Estado existen políticas tendientes a formar y apoyar a los productores en el uso de este recurso?
A.Q.: -En general, todos los países tienen, por lo menos, conciencia de la necesidad de manejar adecuadamente los recursos agua y suelo. Es decir, muchas veces los daños que se pueden provocar tanto en el agua como en el suelo llegan a ser irreversibles. La legislación prevé, de alguna manera, clasificar o asignar distintas categorías de capacidades de uso a los recursos tanto suelo como agua. Pero yo creo que cuando hay una fuerte presión, no es solamente problema de un país sino que la globalización, el mundo, genera cierta presión sobre los sistemas de producción y el productor debe tener renta positiva en su establecimiento y, a veces, el tener márgenes positivos en lo que él está haciendo lo lleva a sobre utilizar los recursos. El productor no escapa, no es inconsciente de lo que está haciendo, pero a veces la situación lo apremia y debe sobre utilizar recursos por encima de sus capacidades. Esto significa que esos recursos van perdiendo no sólo calidad productiva, sino que también los servicios ambientales que estos recursos le prestan al hombre. Esa es un poco la situación, el mundo está muy preocupado por la presión que se está haciendo sobre los recursos que tienen capacidades, y sobre los cuales nosotros estamos excediendo esas capacidades, y toda capacidad que uno excede, normalmente, produce efectos negativos. Creo que no solamente el productor, sino la sociedad, hoy está preocupada por el aspecto productivo y por los servicios ambientales que dejan de prestar estos recursos cuando son degradados.
Recursos humanos.
Para Alberto Quiroga, es indispensable en la actualidad la formación de recursos humanos, la capacitación "sobre la gestión de recursos a los jóvenes, para que puedan ser buenos administradores de estos recursos en el futuro, sobre todo en el tema de agua y suelo".
"No tenemos en el país personas capacitadas como para realmente abordar, desde el punto de vista de la investigación y el manejo, la problemática de nuestros recursos. Actualmente, creo que somos pocos y además estamos dispersos, haciendo gestiones individuales en vez de realizar acciones planificadas a nivel país", dijo el ingeniero.
Puntualizó además que es preciso trabajar en red, con el fin de detectar las áreas del país que presentan mayores dificultades en sus recursos, y en base a esos conocimientos y de las capacidades, "poder gestionar a través de la política, la sustentabilidad y sostenibilidad, nuestros recursos naturales".
Martín Petrucci
Colaborador.
CLIMA: INFORME AGROMETEOROLOGICO DE ABRIL 2010.
Retroceso, con falta de lluvias y noches frías
El primer mes del otoño estuvo signado por un retroceso en el clima. Falta de lluvias adecuadas, y algunas temperaturas bajas, generaron condiciones adversas para la evolución de los vegetales y el estado hídrico de los suelos.
En relación con las condiciones térmicas, la temperatura media del mes de abril estuvo por debajo de lo normal en -1.1º C para Anguil (INTA) y -1.5º C para Santa Rosa (Facultad de Agronomía). Estos valores calificaron al mes más fresco que lo esperado. La marcha de la temperatura durante este período mostró alguna variabilidad entre sitios y décadas (período de diez días). Los primeros diez días arrojaron una diferencia de -0.5º C (Anguil) y -1.2º C (Santa Rosa) respecto de la serie 1977/2009. En la segunda década, se observó una pequeña diferencia entre las dos localizaciones, ya que en Anguil superó en 0.2º C al valor esperado, en tanto que en Santa Rosa fue 0.6º C inferior. Durante la tercera década, la predominancia de masas de aire provenientes del S-SW ocasionaron un importante descenso térmico. Debido a ello, esta etapa culminó con una anomalía (diferencia con lo normal) de -2.5º C para ambos lugares.
La temperatura máxima media del mes exhibió diferencia entre sitios. Para Anguil fue de -0.4º C y para Santa Rosa +0.2º C respecto de lo esperado. La primera década presentó los momento diurnos (valores de máxima) más calientes del mes. La diferencia con lo normal fue de +0.6º C (Anguil) y +1.0º C (Santa Rosa). En los últimos diez días de abril, se produjo una leve disminución de las máximas, culminando la etapa con anomalías de -0.3º C para Anguil y -0.1º C para Santa Rosa.
La temperatura mínima media de abril se apartó marcadamente de lo normal. En Anguil la anomalía fue de -1.8º C, mientras que en Santa Rosa fue aún mayor, llegando a -2.8º C. Si bien las noches de los primeros diez días acusaron registros inferiores a lo aguardado, su anomalía no fue muy marcada en Anguil (-0.2ºC), pero sí en Santa Rosa (-1.3ºC).
Noches frías.
En la segunda década, se mantuvieron las noches más frescas y la anomalía fue de -0.4º C en Anguil y -1.7º C en Santa Rosa. Las noches de la tercera década fueron las más frías del mes. El aire frío establecido sobre el territorio, la baja humedad atmosférica y las noches claras, fueron los principales factores que determinaron este importante descenso térmico. La diferencia con lo normal fue de -4.8º C en ambos lugares.
La temperatura máxima absoluta estuvo bastante por debajo de la absoluta media. Algo similar ocurrió con el valor extremo de la mínima que fue muy inferior a la absoluta media. El día 23 se registró la primera helada del año en abrigo meteorológico.
Condiciones hídricas.
En el mes de abril hubo un neto predominio de baja humedad atmosférica con escaso aporte de rocío. La predominancia de aire estable, y la pobre cantidad de vapor de agua en el aire fueron determinantes en la escasa o nula precipitación acontecida en el ámbito provincial.
Los registros en la zona norte fueron inferiores a lo esperado, entre un 75% a un 95%. En el centro-este de la provincia, la precipitación fue entre un 25% (Gral. Pico) a un 90% menos que lo normal. En el sur y sudeste de La Pampa, la lluvia fue inferior al promedio en un 69% a 93%.
La falta de este fundamental elemento climático se vio reflejada en el balance hídrico climático, que al 30 de abril mostró el siguiente resultado: en el norte provincial el suelo se encontraba entre un 30% y un 50% de su capacidad de campo (óptimo 200 mm. de agua a 1 metro de profundidad), indicando falta de agua en el suelo. La franja central se ubicaba entre un 62% (Santa Rosa) y un 78% (Gral. Pico), en tanto que en el sur también se hace notar la deficiencia hídrica, ya que los suelos se encuentran entre un 42% y un 55% del óptimo.
Las lluvias estadísticamente esperadas para el mes de mayo, de acuerdo a la serie 1961-2009 son: Realicó 25 mm.; General Pico 31 mm.; Eduardo Castex 29 mm.; Victorica 20 mm.; Santa Rosa 30 mm.; General Acha 25 mm.; Guatraché 35 mm. y Bernasconi 25 milímetros.
Ing. Agr. Guillermo Casagrande, INTA Anguil - Fac. de Agronomía.
Ing. Agr. Graciela Vergara, Facultad de Agronomía, UNLPam.
|
|
|