El acto se realizó ayer por la mañana en el Centro Cívico de la Región Rafaela y estuvieron presentes el ministro de Aguas, Servicios Públicos y Medio Ambiente, Antonio Ciancio; el intendente interino de la ciudad, Jorge Maina; el subsecretario de Desarrollo Hídrico, Fernando Mussi; el director provincial de Obras Hidráulicas, Anselmo Zapata, y la coordinadora del Nodo Rafaela, Natalia Enrico, además de funcionarios municipales y del Concejo local y representantes vecinalistas de los barrios que se beneficiaron con las obras.
A comienzos de este año, el primer mandatario provincial anunció que la provincia se haría cargo de la administración de la obra y, a tal efecto, encargó a la administración municipal la elaboración de un borrador de convenio para encuadrar legal y técnicamente la transferencia. El texto fue aprobado por el Ministerio de Aguas, Servicios Públicos y Medio Ambiente y se terminó rubricando ayer.
Las obras en danza significaron uno de los temas de mayor fricción entre la administración provincial y la gestión del intendente, Omar Perotti; roces que tuvieron su pico de mayor acaloramiento cuando una delegación de vecinos, representantes de instituciones y autoridades políticas fueron a la Casa Gris a pedir por la continuidad de los trabajos y la reunión derivó en fuertes cruces del gobernador e integrantes de su gabinete con algunos de los rafaelinos, quienes le recordaron al primer mandatario que había sido una de las promesas de campaña.
La ampliación de la red cloacal en la ciudad había sido aprobada y comenzada en la última gestión justicialista, cuando, luego de las intensas lluvias que soportó la ciudad en marzo de 2007, se elevaron las napas y provocaron el desborde de pozos negros, colocando al sector oeste de la ciudad al borde de la emergencia sanitaria.
Meses después de asumir la actual administración provincial, las partidas para el pago a las empresas fueron suspendidas, argumentando que la decisión obedecía a cuestiones presupuestarias.
El año pasado también se retacearon los fondos y sólo se recibió la mitad de lo comprometido, debido a que aquéllos fueron redireccionados. Finalmente, se objetó el sistema del convenio en el que las empresas estaban contratadas por el municipio pero era la provincia la que pagaba.
La conclusión de los trabajos siguió siendo reclamada con gran insistencia por la gestión municipal, y más aún, cuando a la engorrosa situación se sumó la amenaza de juicios contra el municipio por parte de las empresas, ante la falta de pago de los certificados vencidos por las obras ya ejecutadas, reclamo que la administración local repitió administrativamente contra la provincia, en resguardo de sus intereses.
El trámite llegó a Fiscalía de Estado provincial y se iba a recurrir a la vía judicial, de ser necesario.
Una relación ríspida
No extrañó, entonces, que la presión acumulada en la ríspida relación que mantienen provincia y municipio aflorara ayer en el discurso del intendente interino de la ciudad, el concejal Jorge Maina, quien manifestó sus sospechas de que el entusiasmo de la administración Binner en la continuidad de los trabajos sólo persigue fines electorales al señalar que “lo diferente de otras promesas y otros anuncios es muy sencillo y es que el año que viene hay elecciones, y ésta es la garantía absoluta de que las obras se van a terminar”.
Por el tema cloacas y otras obras estratégicas para la ciudad que fueron postergadas, Maina le expresó a Ciancio que la ciudad de Rafaela es discriminada por la gestión provincial. “El gobernador dice que Santa Fe es discriminada por la Nación y créame, ministro, que Rafaela siente lo mismo de parte de la provincia de Santa Fe. Sería bueno que el gobernador practique en su provincia lo que está reclamando en el ámbito nacional”, apuntó.
Finalizado el acto, y en diálogo con la prensa, el titular de la cartera de Aguas y Servicios Públicos disintió con el concejal y enumeró como obras a “la planta depuradora de líquidos cloacales (comenzada en la gestión Obeid y dejada con un gran avance) y la planta de generación de energía eléctrica (financiada íntegramente por la Nación) y así tendríamos que ir enumerando cuestiones que, a lo largo y a lo ancho del ejido urbano, se han desarrollado. Tal es el caso de los planes de vivienda y como es ahora la licitación próxima de una planta de ósmosis inversa que permitirá reforzar el consumo de agua”.
En el mismo sentido, Ciancio también destacó que “las cloacas son obras importantes que van a superar los 30 millones de pesos y, haciendo cuentas, no estamos por debajo de los 100 a 120 millones de pesos en esta zona”.
|
|
|