Si la primera parte de la reunión entre los diputados y los embajadores estuvo monopolizada por el reclamo europeo por las trabas a las importaciones, la segunda mitad se la llevó un fuerte reclamo argentino por Malvinas.
El socialista Roy Cortina planteó el rechazo a la inclusión del archipiélago en el Tratado de Lisboa que rige como Constitución europea. Dijo que era una "causa nacional" para todos los bloques sin distinción. Y eso se notó porque atrás suyo se apuntaron Patricia Bullrich, Daniel Katz, Fernando Iglesias, la fueguina Liliana Fadul y la neuquina Alicia Comelli.
El embajador español, Rafael Estrella, y el encargado de negocios de la UE, Julio César García Alvarez, intentaron tomar distancia del asunto. Argumentaron que Gran Bretaña incorporó a las islas como territorio de ultramar cuando se sumó a la UE en el 73, mucho antes del Tratado de Lisboa que entró en vigencia el año pasado.
Pero no lograron convencer.
Bullrich reclamó una "actitud proactiva" de la UE instando a Gran Bretaña a abrir el diálogo por la soberanía.
Katz dijo que era "inadmisible" que Malvinas apareciese como dependencia Británica y que esa "tampoco es una buena señal" para la integración entre ambos bloques. Iglesias consideró una "lástima" esa "rémora de colonialismo" y pidió que se le "exija a Gran Bretaña la apertura del diálogo". A la reunión no concurrieron diplomáticos británicos.