El diputado provincial José Antonio Artusi (UCR) anunció que presentará un proyecto de resolución tendiente a solicitar al Poder Ejecutivo Provincial que disponga acciones conducentes a lograr, en el menor plazo posible, la elaboración e implementación de planes, programas y proyectos que garanticen el tratamiento adecuado de los líquidos cloacales de la totalidad de las localidades que vuelcan los mismos al río Uruguay o a alguno de sus afluentes, en el tramo compartido entre la República Argentina y la República Oriental del Uruguay
El presidente del bloque radical consideró que “la contaminación bacteriológica del río Uruguay en su tramo inferior, compartido entre nuestro país y el Uruguay, no es un dato novedoso. Uno de los factores que inciden negativamente en la persistencia de este problema es la falta de tratamiento de buena parte de los efluentes cloacales de las ciudades ribereñas, que son volcados crudos, directamente al río Uruguay o bien a algunos de los ríos y arroyos de su cuenca. La mayoría de las localidades carecen de plantas de tratamiento, con el consiguiente efecto perjudicial en la calidad de las aguas”.
“Este deterioro ambiental viene siendo reconocido desde hace muchos años, tanto por los estudios periódicos que se hacían en el marco del Programa PROCON de la CARU como por estudios realizados por organismos municipales, provinciales y nacionales, a los que viene a agregarse recientemente un estudio elaborado por el Instituto Nacional de Tecnología Industrial”, añadió.
Artusi enfatizó que “está claro que el problema no tendrá solución hasta tanto no se tomen acciones contundentes y coordinadas, y que no puede esperarse alegremente que cada municipio, en un contexto de recursos escasos, resuelva por sí sólo el problema. Es menester en este caso asumir una visión propia del enfoque de la gestión integral de los recursos hídricos y hacerlo a nivel de cuenca, haciendo intervenir a todos los organismos y jurisdicciones involucrados. De otra manera, sin una visión y acción de conjunto, queda claro que no se podrá dar una respuesta acorde a la magnitud del problema. Se trata de una cuestión que excede los límites jurisdiccionales de cada localidad, puesto que la falta de tratamiento de los líquidos cloacales tiene un impacto en el entorno inmediato pero también repercute por lo general en los territorios y núcleos urbanos situados aguas abajo, en una y otra orilla del río”.
El legislador uruguayense afirmó que “consecuentemente, el carácter binacional de la región transfronteriza del bajo río Uruguay es un factor adicional de complejidad, pero debe a la vez verse como una oportunidad. Es mucho lo que está en juego, la salud ambiental y humana, la posibilidad de que el río siga siendo el sostén de numerosas actividades productivas y de servicios como el turismo, etc. Está claro también que no se trata del único problema ambiental del río Uruguay, afectado a su vez por industrias que no cumplen las normativas vigentes, por el impacto de una incorrecta gestión de los residuos, y por el uso inadecuado de productos agroquímicos en algunos casos, entre otros factores”.
No obstante, el diputado señaló que “ello no debe ser un obstáculo para avanzar en la solución del problema que nos ocupa en este caso y que proponemos atacar decididamente, haciendo que la provincia, la Nación, los municipios y comunas, y las autoridades de la vecina orilla articulen acciones y asuman compromisos concretos para avanzar en una asignatura pendiente que ya ha sido demorada demasiado. Asignatura pendiente, por otra parte, de la que poco se habla, pero que constituye una grave y seria amenaza para las posibilidades de nuestra región de garantizar una perspectiva de desarrollo humano sustentable”.
|
|
|