Ayer se inició un plan de desratización que es complementario a las obras de limpieza y saneamiento del arroyo Langueyú que instrumentaron el Municipio de Tandil y el Estado provincial.
En fuentes comunales se indicó que la primera etapa del proyecto integral de saneamiento abarca un tramo de 700 metros de cauce y que la inversión que realiza la Provincia es de poco más de un millón de pesos, a partir de un convenio con el Municipio.
Máquinas y equipos de la Dirección de Hidráulica provincial desarrollan su tarea en coordinación con distintas áreas municipales, y entre las acciones emprendidas se mencionó al retiro de ramas, árboles y limpieza del cauce del arroyo.
Se prevé además la profundización del curso de agua y la mejora del arroyo en todo el tramo entre la calle Labardén y la avenida Circunvalación, labor que se ejecutará en distintas etapas.
Casa por casa
El director de Bromatología, Omar Olivera, explicó que luego de la limpieza y desmalezamiento del primer tramo del arroyo Langueyú, se inició un trabajo “pasando casa por casa, en todas las inmediaciones del curso de agua”.
Acotó que “luego del saneamiento era muy probable que las ratas buscaran refugio en las viviendas cercanas”, por lo que “el personal recorre cada uno de los domicilios, para realizar un diagnóstico sobre la posibilidad de la existencia de ratas. De todas maneras, igualmente se dejan cebos colocados para la prevención”.
Tal trabajo se realizará en “el sector aledaño a las márgenes del Langueyú, por calle Darragueira, hasta Chapaleofú”, en tanto que se estima que insumirá entre diez y quince días, según Olivera.
Por su parte, la concejal María Haydée Condino dijo ayer a El Eco de Tandil que “estuvimos viendo cómo inició el trabajo la dirección, recorriendo casa por casa, donde se entregó un veneno y se explicó su utilización”, a la vez que destacó que “las márgenes del arroyo están siendo limpiadas, se sacarán las raíces, plantas podadas, etc.”.
El cambio de puente
Añadió que el trabajo se desarrollará en varias etapas. La inicial comprende los primeros trabajos sobre el lugar, en tanto que en la segunda “vendrán las máquinas a hacer el trabajo en el arroyo y se está esperando que desde la Provincia den los últimos retoques del proyecto para que se inicie el cambio del puente”, que es “el trabajo real que da origen a la limpieza que sigue”.
La edil oficialista dijo que “hay escuelas de ambos lados que se comunican a través del puente y es un tema que nos preocupa”, tras lo cual marcó que “para hacer el puente nuevo hay que volar al viejo, lo que requiere un estudio dado los caños que pasan por allí”.
Condino marcó que “la Dirección de Hidráulica provincial es la que va a poner la fecha y se comunica continuamente con la Secretaría de Obras Públicas del Municipio para acordar esto”.
Las obras contemplan “un puente peatonal para evitar que escolares y vecinos tengan que caminar muchas cuadras. Es algo que había contemplado la Provincia”.
Una cuestión de paciencia
Contrarrestando cuestionamientos, la concejala Condino afirmó que “tanto la obra de cloacas como la limpieza del arroyo son pedidos de entre diez y 30 años. Que tarde tres meses más o un año más una obra que ha sido esperada 30 años es una cuestión de paciencia. La obra se va haciendo: por etapas va avanzando”.
En cuanto a la reparación de las calles, la edil dijo que la Municipalidad ha obtenido un crédito para poder comprar maquinaria vial por cinco millones de pesos, algo que ya está aprobado por el Concejo.
Acotó que “hay plazos que cumplir para hacer la compra” y que “cuando tengamos las máquinas nuevas se podrán hacer los arreglos mucho más rápidamente”.
Y, por último, admitió que “en esta época del año Vialidad municipal no da abasto porque una lluvia destruye el trabajo que se hizo en 15 días. Es uno de los problemas que tenemos y que trataremos de solucionar con la maquinaria nueva”. *
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