El canal de la avenida Roberto Romero, en el sur de la capital salteña muestra la misma y lamentable imagen que otros cursos de agua en la ciudad. En estos meses del año, época seca en la región, plásticos, cajas, restos de comida, de autos, escombros, es posible encontrar en esos cauces. Ahora, producen mal aspecto, olores y pueden ser focos de insalubridad. Cerca de fin de año, cuando llegan las lluvias, la basura actúa como diques de contención y contribuye a los desbordes e inundaciones.
Y los vecinos se quejan. Pero a poco de ser limpiados por quien corresponde, la desidia y la irresponsabilidad social retroceden la situación al punto anterior: el canal sucio.
El estado municipal tiene su obligación en esta cuestión, pero “la gente no debe mirar para otro lado y limitarse a trasladar responsabilidades”, dijo un hombre mayor a El Tribuno.
Los residentes de diferentes barriadas capitalinas continúan comunicandose a la Línea Directa de El Tribuno (4-246-246) para hacer oír sus reclamos. En este caso se trata de los vecinos de la zona sur.
Es que el canal de la avenida Roberto Romero, que divide los barrios El Tribuno e Intersindical, se convirtió en un verdadero microbasural.
“Desde que bloquearon el paso de agua, hace un mes, algunos vecinos desaprensivos y gente que pasa por el lugar arroja sus residuos a lo largo del canal como si se tratara de un contenedor”, contó Silvia, una vecina.
Riesgos para la salud
Los transeúntes también expresaron su malestar por el aspecto del lugar.
“Esta zona era muy bonita, muchas personas venimos a correr y a pasear por aquí durante la tarde. Es una lástima que ahora esté en estas condiciones deplorables”, agregó Gustavo, otro lugareño que también advirtió sobre los criaderos de insectos y roedores y la posibilidad de que se formen focos infecciosos, con el consiguiente riesgo para la salud.
A partir de la intersección de la avenida Roberto Romero y la calle Nueva Provincia, a lo largo de dos cuadras, es posible encontrar en el interior del conducto desde botellas, bolsas, papeles, cartones, envoltorios, envases de tetrabrik y ramas hasta gomas de autos, restos de andadores de bebés y pedazos de artículos del hogar.
“Los dueños de verdulerías cercanas tiran sus residuos en el canal por comodidad, por eso hay pedazos de cajones de madera y restos de verduras y frutas. Se trata de una cuestión de conciencia.”, dijo Luján otra de las vecinas preocupadas por el medio ambiente.
“El canal se está convirtiendo en un criadero de alimañas e insectos. Es necesaria una limpieza urgente”, agregó Anahí, otra residente.
Contaminación
Los vecinos del barrio Intersindical se mostraron preocupados por la contaminación.
“ Estamos ante focos infecciosos altamente peligrosos para todos los vecinos de la zona sur. Principalmente para los niños que vienen a jugar. Pedimos a la municipalidad la limpieza de la zona y que la gente no tire más basura, porque esto es un asunto de las dos partes”, coincidieron los vecinos que hablaron con El Tribuno.
A unos pocos metros del canal los chicos se divierten y pasan tardes enteras jugando en el Barrio Intersindical. Allí, la diversión infantil convive con los restos de basura y el olor nauseabundo que se dispersa |
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