El Frente Cívico Federal denunció ayer a la intervención de Obras Sanitarias Mendoza por la incorporación de gerentes con sueldos en dólares a un mes de que se venza el plazo para la normalización de la compañía. Mientras tanto, desde el Gobierno les contestaron que estaban haciendo “un montaje electoral” y advirtieron que en unos días darán a conocer un informe en el que revelarán el “desconocimiento” que tuvieron las administraciones radicales de Roberto Iglesias y Julio Cobos sobre la realidad de la empresa.
Ayer a la mañana, el gobernador Celso Jaque presidía la reunión de gabinete en el tramo final cuando dos diputados del Frente Cívico Federal irrumpieron en el cuarto piso del palacio gubernamental de la calle Peltier con un escrito de dos carillas. Néstor Parés y Daniel Dimartino iban a presentar una nota firmada por diez miembros del interbloque y no desaprovecharon el interés de la prensa para levantar el tono en declaraciones periodísticas.
“Queremos saber qué piensa hacer el Gobierno con Obras Sanitarias”, comenzó diciendo Parés, quien actuó como vocero ante los cronistas. “Queremos saber si la intervención sirvió para algo o si sólo se dedicó a contratar gerentes con altos sueldos en dólares, como los que se les asignan a los ejecutivos de las empresas de carácter internacional”, prosiguió el diputado, levantando el volumen.
“Queremos saber cuánto cobran los gerentes. Si no conseguimos que nos contesten este pedido de informes, como correspondería que hagan, nos constituiremos en la empresa para enterarnos in situ de la situación”, amenazó el legislador del Frente Cívico.
“¡A un mes del fin de la intervención siguen contratando gerentes!”, exclamó, antes de explicar que las sospechas que tiene el Frente Cívico se fundan en informaciones no oficiales emanadas de la misma empresa.
“Nos dirigimos a usted para manifestar nuestra profunda preocupación respecto de la situación actual de la empresa”, dice la nota que ingresó por Mesa de Entradas del Ejecutivo.
Además, extiende el estado de preocupación “al vencimiento del plazo de intervención, la falta de información en la Legislatura sobre el estado real de la empresa y las recurrentes noticias en los medios de comunicación referidas a la mala prestación del servicio”.
La principal alarma de los legisladores del Frente Cívico se funda en que el 3 de agosto vence el plazo de la intervención estatal de la empresa de agua y el Gobierno aún no comunicó cuál será el futuro ésta.
Dos radicales “engañados”
Si bien la respuesta pública del oficialismo salieron a darla el ministro de Gobierno, Mario Adaro, y el secretario de Ambiente, Guillermo Carmona, desde el influyente despacho del Ejecutivo se lanzó una contraofensiva furiosa con dardos destinados a desprestigiar la gestión frente a Obras Sanitarias de los ex gobernadores radicales Iglesias (1999-2003) y Cobos (2003-2007).
“Nosotros tenemos información fehaciente del estado de la empresa porque tuvimos la decisión de intervenir cuando nos dimos cuenta de que la cosa no funcionaba. Iglesias y Cobos no sabían cuál era la realidad de la compañía mientras fueron gobernadores”, dijo una encumbrada fuente, a cambio del resguardo de su identidad.
En el Ejecutivo aseguraron que cuando se conozca la auditoría que hace la UNCuyo revelarán la desinformación de las anteriores gestiones.
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