(PL) El presidente mexicano, Felipe Calderón, informó que hoy realizará gira de trabajo por los estados de Tamaulipas y Nuevo León, los más seriamente dañados por el huracán Alex y las severas precipitaciones de los últimos días.
Ninguno de los reportes llegados de ambos territorios resultan halagüeños: inundaciones, desbordamientos de ríos, pérdida de viviendas, roturas de carreteras y puentes, miles de personas en albergues.
Autoridades de Nuevo León, Tamaulipas y Coahuila, también damnificado por las lluvias, indican que casi medio millón de habitantes están afectados por avenidas extraordinarias en los ríos, ante la necesidad de poner a aliviar varios embalses para evitar mayores riesgos a cuenta del volumen de agua acumulada.
Aunque la Comisión Nacional del Agua realizó desfogues controlados en las presas de Coahuila, Nuevo León y Tamaulipas decenas de localidades quedaron inundadas, hubo derrumbe de puentes, averías en carreteras e inmuebles, reporta la prensa local; entre los embalses puestos a aliviar figuran La Amistad, Falcón y Venustiano Carranza.
La Amistad, ubicada sobre el río Bravo, es una obra compartida entre México y Estados Unidos.
Los autoridades fronterizas de ambos países acordaron cerrar el puente internacional Número Uno que comunica Nuevo Laredo con Laredo, Texas, por el torrente del caudal y el aumento previsto en la altura de las aguas.
Aproximadamente 40 mil residentes en las zonas asoladas por las inundaciones de diques que dejaron las lluvias remanentes del huracán Alex perdieron sus casas de manera parcial o total, señalan noticias de la prensa mexicana.