Atravesar la localidad de El Volcán por la ruta 20 puede dar la sensación de que todo esta bien. Una avenida asfaltada, comercios con buen movimiento de ventas, buena iluminación y orden, dan buena apariencia. Pero entrando al pueblo y hablando con sus habitantes, los de toda la vida, no los que pasan sólo los veranos, surge que los problemas o las carencias son muchas: reclaman por asfalto, mayor limpieza, obras de cloacas y de gas natural e inclusive una farmacia, porque no tienen donde comprar los remedios. El contraste de un pueblo que se estancó y es cada vez más opacado por el crecimiento de lugares turísticos como Potrero de los Funes y El Trapiche.
Los vecinos consultados por El Diario coinciden en que el pueblo se detuvo en el tiempo. “Hace 20 años era la perla de las sierras, un verdadero paraíso y el lugar más elegido por los puntanos, pero poco a poco se fue quedando atrás, cerraron los hoteles, algunos camping, no llegaron inversiones privadas y los turistas poco a poco fueron optando por otros destinos, con más servicios”, comentó Delia, habitante de la banda este.
Una nota que publicó este medio es su página web, sobre una firma de convenio entre el programa Turismo y la escuela Subsecretario Carlos Sadoc San Martín para fortalecer el turismo en la localidad, sacó a la luz –de acuerdo a los comentarios de la noticia de los vecinos- que antes de invitar a turistas se deben solucionar algunos aspectos.
“Es un pueblo hermoso, lastima que este olvidado y arruinado. Por favor arreglen las calles y todo lo que hay que hacer. Es un pueblo muy turístico con muchos paisajes para disfrutar”, dice uno de los comentarios. Como ese hay otras treinta sugerencias que coinciden en el deterioro de las calles, el pedido por las cloacas y la reactivación de la planta de tratamientos de los líquidos, el gas natural, cable, la necesidad de más transporte, entre otros reclamos.
Héctor es un vecino del barrio Madre Teresa de Calcuta. Dijo que hace diez años que vive en El Volcán y que no ha visto que se haga nada por el progreso. “No es sólo un problema de esta gestión sino de las anteriores también. Las calles internas son un desastre, el río es un depósito de mugre y están surgiendo basureros públicos por el camino que une con Potrero”, indicó.
Marcela vive a la vera de la ruta 20, reconoce que la actual gestión se ha preocupado por la iluminación y la recolección de residuos, “aunque los fin de semana largos, el río queda hecho una mugre”. Comentó que es notoria la diferencia con Potrero o El Trapiche, sobre todo en el atraso en los servicios.
“Necesitamos urgente una farmacia, para comprar hasta una aspirina tenemos que ir a Juana Kolsay. También una estación de servicio, restoranes y más emprendimientos privados”, agregó Marcela.
“Nos falta la unión de los vecinos, cada uno tira para su lado. Las soluciones no van a venir sola”, comentó Carmen, comerciante en el sector de La Hoya. Igualmente marcó como el principal problema el estado de las calles, “no se puede salir a caminar por los pozos y la mugre”, expresó.
Otro de los grandes problemas en que coincidían los vecinos, por la preocupación que les generó, es sobre la posible instalación de la planta de tratamiento de líquidos cloacales a escasos metros del río. “Unas 15 familias nos movimos en reuniones, pasando nota a la Municipalidad y el gobierno para impedir que comenzará a funcionar así”, comentó Delia.
La obra finalmente se paró. El intendente, Marcelo Mocdese informó que ninguno de los líquidos que eliminen los digestores se volcarán en el río. Dijo que en este momento se esta realizando una ampliación de la red de afluentes cloacales a la planta de tratamiento de Juana Koslay. (Ver "En breve llega el gas y la pavimentación).