El debate por las regulaciones a los megaemprendimientos mineros avanza en todo el país, en el marco de una disputa que cruza al oficialismo y a la oposición y que se empobrece cuando se convierte en un enfrentamiento de “buenos” contra “malos”.
Esta semana, los diputados Elisa Carrió (Coalición Cívica) y Miguel Bonasso (vinculado a Proyecto Sur) le reclamaron a la Justicia que se investigue a la presidenta Cristina Kirchner por posible “tráfico de influencias” a favor de la empresa minera Barrick Gold.
En tanto, frente al avance de una norma de protección de Glaciares en la Cámara baja, gobernadores de las provincias cordilleranas mantuvieron una reunión en Buenos Aires, donde acordaron impulsar que sean sus distritos los que fijen las políticas ambientales, teniendo en cuenta la “especial situación” de cada uno de ellos.
Juan Manuel Urtubey (Salta), Luis Beder Herrera (La Rioja), José Luis Gioja (San Juan), Celso Jaque (Mendoza) y Walter Barrionuevo (Jujuy) sellaron el pacto.
Todos ellos son oficialistas, pero del encuentro también participaron representantes de Río Negro, Neuquén y Catamarca, provincias que no están gobernadas por el PJ.
Los gobernadores de las provincias “mineras” sostienen que hacen valer su derecho, mientras que los sectores más enfrentados a la megaminería consideran que se adelantan para evitar una regulación adversa en el Congreso de la Nación.
En ese grupo tampoco son homogéneas las posiciones: el gobierno de Mendoza anunció que esperará a que exista una ley nacional de protección de glaciares.
En la Legislatura de San Juan ya ingresó un proyecto, mientras que en La Rioja se aprobó sobre tablas con oposición de la UCR, una ley de protección de glaciares que deja en manos de la provincia el poder de policía sobre sus recursos naturales.
En ese contexto, de sectores de la oposición como el PRO y algunos referentes de la UCR, como Julio Cobos, no se han escuchado aún posiciones sobre la cuestión de la minería.
Sí resonó el debate televisivo entre Bonasso y el senador Daniel Filmus, quien, luego del veto de la presidenta Cristina Kirchner a una ley sobre los glaciares desarrolló un nuevo proyecto.
Filmus asegura que la nueva iniciativa protege más a los glaciares que la anterior y esgrime el apoyo de organizaciones como Greenpeace y Vida Silvestre Argentina.
Bonasso asegura que en el proyecto de Filmus se esconden motivos espurios y que sus artículos se vinculan a las buenas relaciones entre empresas mineras y el Gobierno nacional.
Durante el debate, se escuchó decir al diputado, ex aliado del kirchnerismo, que ningún proyecto que apoye el senador sanjuanino César Gioja puede ser una buena iniciativa y comparó a ese dirigente con “Al Capone”.
Ahora será el Congreso el ámbito en el que se den las necesarias discusiones sobre las regulaciones económicas y ambientales sobre la megaminería.
Es deseable que allí se eleve el nivel del debate con información precisa y transparente, que todos los bloques legislativos tienen la responsabilidad de aportar.