General Acha (A) - “Los estudios de impacto ambiental que presentó el Gobierno sobre FIASA no sólo son extemporáneos sino que además no tienen ningún tipo de sustento legal”, sostuvo en diálogo con El Diario Ana Daniela Fiorano, una de las representantes de los “Autoconvocados por Acha sin Contaminación”.
La referente de ASCO reconoció que “esos datos, la verdad, nos tomaron por sorpresa... Igual creemos que sólo son estudios técnicos que nada tienen que ver con un verdadero estudio de impacto ambiental solicitado por Ecología a la Provincia y agregado al expediente... Es decir que estos datos fueron aportados por fuera del expediente confeccionado en la Subsecretaría de Ecología de la Provincia”.
“Acá no se quiere respetar las pretensiones, decisiones y resoluciones tomadas por el pueblo, ya que a través de los mandatos que nos dieron las distintas asambleas populares fuimos llevando adelante las gestiones dispuestas, y una a una, al igual que otras documentaciones, fueron incorporadas en el expediente que se conformó en ese organismo estatal y en el cual no constan los resultados aludidos”, agregó Fiorano.
Y destacó: “Debemos recordar que la movilización de la ciudadanía achense, y otras localidades vinculadas al uso y usufructo del Acuífero del Valle Argentino, fueron determinando uno a uno los pasos y gestiones que se siguieron, hasta que el veredicto del cuerpo de concejales, los legítimos representantes de los pobladores de esta ciudad, siendo además el único órgano legal que puede habilitar la instalación de una industria en el radio de su jurisdicción, prohibió la instalación de la fábrica en una sesión especial, la que también oportunamente fue promulgada por el Ejecutivo Municipal, por lo que tiene carácter de ley obligatoria”.
“Lo que también sorprende es que estoicamente los gobernantes desconocen lisa y llanamente los deseos, decisiones y resoluciones de su pueblo, que sólo busca una mejor calidad de vida para todos y que bajo ningún punto de vista quiere la instalación de esa industria... Esta fábrica sólo puede traer perjuicios para sus pobladores y con seguridad no traerá beneficios para ellos sino para quienes la proyectan. De hecho, todavía hay dando vueltas un préstamo de quince millones para permitir que la fábrica entre en funcionamiento”, subrayó Fiorano.
La referente de los autoconvocados también se refirió al caudal del agua que utilizaría la planta: “No debemos olvidar lo que estableció ASCO a lo largo del expediente, que la toma de agua del acuífero sería de unos 90 metros cúbicos de agua por hora, es decir 90.000 litros. Es decir que con el funcionamiento de la industria, durante las 24 horas del día, se insumiría algo más de 1.800.000 litros diarios”.
“Esa masa de agua es muy importante y no ‘ínfima’ como reconocen los propietarios de esa industria, y aunque el acuífero pueda reponer ese caudal automáticamente entendemos que ese líquido debería utilizarse, por ser de muy alta calidad, para otros usos con mayor provecho”, completó la autoconvocada.