Por falta de quórum, ya entrada la madrugada de ayer, quedó trunca la media sanción del proyecto de ley de protección de glaciares en la Cámara de Diputados. Tras casi diez horas de intenso debate, los legisladores sólo lograron aprobarlo en general, pero resta aún el tratamiento en particular de los artículos.
A las 3 de la madrugada, la iniciativa -que resultó de una negociación entre el diputado Miguel Bonasso (Diálogo por Buenos Aires) y el senador oficialista Daniel Filmus- fue aprobada en general por 129 votos afirmativos contra 86 negativos. A renglón seguido, los legisladores abordaron el tratamiento en particular de los artículos, pero sólo aprobaron los primeros 5 de los 17 que contiene el proyecto.
La sesión se quedó sin quórum luego de que el oficialismo y algunos legisladores de la oposición se retiraron discretamente del recinto. Los kirchneristas ya habían anticipado su renuencia a acompañar la iniciativa; el jefe del bloque, Agustín Rossi, había pedido 15 días para estudiar el acuerdo al que habían arribado el día anterior Filmus y Bonasso, solicitud que finalmente no se le concedió. Si bien la oposición logró aprobarlo en general, a la postre Rossi logró salirse con la suya porque recién en agosto (tras el receso legislativo) se retomarán las sesiones en el cuerpo.
Sectores de la oposición, como el bloque Pro, también tenían sus resquemores para con el proyecto. Básicamente, los reparos apuntan a la definición del ambiente periglaciar que la iniciativa pretende proteger. Varios legisladores, sobre todo quienes son oriundos de la zona cordillerana, advirtieron que la definición incluida en el proyecto restringiría la posibilidad de realizar cualquier actividad minera o industrial en el área. Esto repercutiría negativamente en el desarrollo económico de sus provincias, alertaron.
"Lo que surge del dictamen es que todos los periglaciares no pueden tener minería. O sea, todos los suelos congelados que, obviamente, regulan recursos hídricos -porque se refieren al agua- tendrían vedada la actividad minera en toda la cordillera de los Andes", indicó el jefe del bloque de Pro, Federico Pinedo.
"Para los riojanos, el agua es más importante que el oro", enfatizó, por su lado, el diputado radical Julio Martínez. Al cierre del debate, Rossi anunció que la presidenta Cristina Kirchner le había comunicado, vía telefónica, que cualquiera fuera la decisión del Congreso la Presidenta "no va a vetar el resultado que apruebe el Parlamento".