La Legislatura prorrogó la intervención estatal de Obras Sanitarias Mendoza (OSM) hasta el 27 de setiembre. Pero el oficialismo no logró el aval de la oposición y se quedó sin el anticipo financiero de $10 millones que pedía el Gobierno. El Ejecutivo estudia ahora la posibilidad de emitir un decreto para obtener financiamiento para el funcionamiento de la empresa en los próximos 60 días.
La estrella de la maratónica jornada, en la cual sesionó primero Diputados y luego el Senado, fue nuevamente la tensión entre el oficialismo y los partidos que integran el Frente Cívico Federal.
La batalla inicial se dio en la Cámara Baja. Allí, el primer artículo, que prorrogó la intervención de OSM por 60 días, fue aprobado por unanimidad con 47 votos y un solo ausente.
Pero el PJ no logró convencer al PD, la UCR y el CONFE, y terminó perdiendo la votación en el debate sobre el financiamiento de $10 millones, que estaba en el segundo ítem.
Finalmente, la entrega de dinero fue rechazada por 25 votos (de demócratas, radicales y cobistas), contra 20 avales positivos (de justicialistas y aliados). Aunque Roberto Blanco (Unidad Popular) y Daniel Cassia (PJ Federal) se abstuvieron.
Con este resultado en mano, el PJ dejó caer el tercer artículo del proyecto, que fijaba un plazo de 90 días para que el Ejecutivo diseñara el nuevo modelo de gestión de OSM.
En este ítem, el justicialismo necesitó del acompañamiento de Ricardo Puga (PIM), quien inicialmente se había abstenido y terminó dando el voto que le faltaba al oficialismo para eliminar la exigencia de tiempos en el armado del plan estratégico.
Otro de los puntos que se planeaba agregar pero que quedó fuera de la ley fue la conformación de una comisión investigadora que indague en las responsabilidades políticas sobre el estado de la empresa desde el ‘98 (año de la concesión a los privados) hasta la actualidad.
Esta iniciativa quedó plasmada en un proyecto de resolución que se debatirá mañana en Diputados.
Cerca de las 19, el Senado comenzó a sesionar y en menos de una hora, por unanimidad, avaló la prórroga de la intervención.
La pelea con Cobos
La tensión entre el PJ y el Frente Cívico comenzó muy temprano, luego de que radicales y cobistas anunciaron que no votarían a favor de los $10 millones.
Si bien el PD tampoco acompañó al oficialismo, las críticas del peronismo fueron hacia la UCR y el CONFE.
El encendido ataque contra los líderes del radicalismo que hizo al mediodía Alejandro Cazabán, secretario general de la Gobernación, tuvo eco en la Legislatura.
Apenas una hora después de iniciada la sesión, el presidente de Diputados, Jorge Tanús, tomó lugar en una banca y acusó al Frente Cívico. “Esto parece una asociación ilícita entre funcionarios y concesionarios”, dijo . Y agregó: “(Julio) Cobos y (Francisco) Morandini le perdonaron más de $100 millones de desinversión a la empresa”.
Luego fue el turno del presidente del bloque del PJ, Carlos Bianchinelli, quien acusó a radicales y cobistas de “no haber controlado a los privados cuando gobernaron”.
Mientras, Roberto Pradines (PD) argumentó el rechazo a la partida de $10 millones diciendo que “la intervención estatal es malísima y hasta confunden el debe y el haber”.
Luego fue el turno de la defensa de los cobistas. “Acá se han hecho denuncias muy graves, se ha hablado de una asociación ilícita que incluye al vicepresidente (Cobos). Yo les pido que entonces se presenten en la Justicia”, indicó Patricia Gutiérrez (Unidad Popular).
Sobre el final, y con la votación del financiamiento perdida, Bianchinelli deslizó que “hay una posibilidad de que el Gobierno saque un decreto pidiendo el dinero porque la empresa no puede funcionar”.
Más tarde, el mismo Cazabán indicó que “se está analizando qué instrumento jurídico se utilizará”.
Cómo se llegó al voto opositor
Tanto los legisladores demócratas como los del interbloque que forman radicales y cobistas bocharon la entrega de $10 millones al Gobierno para el funcionamiento de OSM. Pero la diferencia central fue que el PD se mostró unido desde el principio, mientras que el Frente Cívico reveló fisuras a pesar del voto negativo unánime.
En el caso de los gansos, la decisión se tomó el jueves pasado, tal como relató a Diario UNO el senador Carlos Aguinaga. “Nosotros sabíamos hacía varios días que no íbamos a avalar ese dinero”, dijo.
Pero radicales y cobistas estaban divididos en dos posturas: algunos querían abstenerse de votar y que el PJ consiguiera los $10 millones, mientras que otros pretendían el rechazo absoluto al financiamiento.
Con esas dos posiciones, los diputados y los senadores del Frente Cívico Federal se sentaron ayer cerca de las 9 para alcanzar una decisión unánime.
Finalmente, la postura del rechazo se impuso por un voto y esto se reflejó en la votación de ambas cámaras.
Aunque algunos, como los radicales Raúl Vicchi y Liliana Vietti, y el cobista Andrés Marín aclararon al votar por el no que “es por mandato imperativo del bloque”. |
|
|