Héctor Timerman se puso ayer a disposición de los ambientalistas de Gualeguaychú para mantener una reunión con ellos este fin de semana. Sin embargo, dada la estructura orgánica de la asamblea que se reunirá mañana, el encuentro pasará para el miércoles o jueves de la semana próxima, según dijo ayer a este diario el asambleísta José Pouler, quien además afirmó que “sería bueno que sea Timerman quien venga a reunirse con nosotros en Gueleguaychú”.
Pouler dijo a este diario que su gente quería “conocer la letra chicha y los parámetros” del reciente acuerdo firmado entre Cristina Kirchner y José Mujica para un monitoreo conjunto, y por parte de científicos uruguayos y argentinos de la planta de UPM (ex Botnia) y de todos los establecimientos industriales y campos que dan al binacional Río Uruguay.
Aunque para los gobiernos el acuerdo representó el final de una larga saga en torno al conflicto pastero, los asambleístas de Gualeguaychú expresaron su decepción con el mismo. Y el riesgo es que vuelvan al corte fronterizo tras la tregua de 60 días que declararon a mediados de junio.
Según consignaba ayer la agencia DyN ayer, durante un encuentro con periodistas extranjeros, el canciller dijo que no tenía “la menor idea” sobre la posible intención de los asambleístas de retornar al bloqueo de la ruta, ante su disconformidad.
Timerman se desentendió del tema y dijo que los cortes eran “un problema de la Justicia, no de la Cancillería”.
“Entró el pedido de la reunión de los Asambleístas. Hoy a la tarde, mañana o el domingo estoy a disposición”, respondió el canciller el pedido que le hicieron los ambientalistas de manera formal y expresó su disposición a modificar algunas actividades de su agenda para “facilitar” el diálogo.
Timerman invitó ayer formalmente a los asambleístas a mantener su reunión para “explicarles los alcances del acuerdo”.
Lo hizo por una carta que luego distribuyó a los medios, y en la que les daba cuatro fechas tentativas para elegir, y “en respuesta a la nota recibida hoy (por ayer) a las 10.23 horas por parte de la Asamblea de Gualeguaychú”.
Con todo, lejos de ser un día tranquilo, algunos asambleístas dijeron haberse enterado de su intención de reunirse con ellos a través de las redes sociales, lo que generó otra polémica virtual con el ministro durante todo el día.
Que la palabra del canciller se cumpla
Clarín publicó ayer que el ex canciller Jorge Taiana había resuelto que todos los documentos vinculados con el diferendo con Uruguay sobre las pasteras tenían el carácter de “reservado”. La resolución 817 del 5 de mayo de 2006 se había dictado en virtud de que la circulación de esa documentación, sobre todo las actas de las reuniones de la Comisión Administradora del Río Uruguay (CARU), podía poner en riesgo la posición argentina ante la Corte Internacional de La Haya.
En la columna del Editor al Lector, que se publica en la página 2, el editor general de Clarín, Ricardo Kirschbaum, había reflexionado sobre el carácter “retroactivo” (alcanzaba a todo lo que se hubiera producido en la CARU o el resto del Gobierno desde el 1° de enero de 2002) de la disposición ministerial y había sugerido al actual ministro de Relaciones Exteriores que, en virtud de que el conflicto terminó y la Corte de La Haya ya se ha expedido, la “reserva” de los documentos carecía de sentido.
En su respuesta, el canciller Héctor Timerman, además de repetir la muletilla oficialista de que Clarín miente, anunció que esos documentos ya tenían el libre acceso para quienes quisieran consultarlos. Se desconoce si hubo una resolución que anulaba la anterior para liberar las actas o si la “reserva” caducó automáticamente con el fallo de La Haya. Eso parece decir Timerman.
Sea como fuere, Clarín pidió anoche, también por Twitter, que se permitiese a los periodistas de este diario consultar esas actas de la CARU.
Timerman debería dar instrucciones a los funcionarios de su ministerio para que su palabra se cumpla. Sería un hecho importante y auspicioso que toda la documentación del conflicto con Uruguay por las pasteras quedase abierta al escrutinio público.
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