En los últimos años, la impermeabilización de canales de riego en la zona Este ha sumado centenares de kilómetros de cauces mejorados en toda la región, a partir de la inversión de decenas de millones de pesos que lleva adelante el Departamento General de Irrigación.
Las obras millonarias, que sirven básicamente para optimizar el agua de riego que fluye hacia las plantaciones, muestran sin embargo notables falencias en la prevención de accidentes, ya que se observa la ausencia de barandas o de una barrera de contención que eviten una caída al cauce, fundamentalmente en el cruce de los caminos con estos canales.
"Es un peligro potencial y en la licitación tendría que estar prevista la construcción de alguna barrera metálica que acompañe al cauce en los lugares más peligrosos; resulta verdaderamente extraño que en inversiones que suman millones de pesos no se haya contemplado el peligro que supone que alguien pueda caer accidentalmente a un canal", opinó el intendente de Junín, Mario Abed.
Y aseguró haber señalado el problema en los días previos a la inauguración realizada en junio, de los 24 kilómetros del cauce del canal Constitución-Medrano, que riega 13.000 hectáreas de Junín y Rivadavia y que demandó una inversión de 46 millones de pesos.
"No es el único caso y ya hemos tenido un accidente en la zona de Medrano, cuando hace poco un Fiat 147 se cayó precisamente a ese cauce", agregó el intendente, y reiteró que "resulta extraño que no se hayan ejecutado esas obras, porque el Banco Interamericano de Desarrollo (BID) es muy previsor en ese tipo de temas a la hora de otorgar el crédito".
En Junín y junto al carril Moyano corre uno de los cauces recientemente impermeabilizados, pero además de la ausencia de una barrera de contención, en muchas zonas puede verse que el nivel del canal está por debajo del camino, lo que hace todavía más factible una caída al cauce; si bien Vialidad Provincial ha plantado largas filas de álamos que acompañan a esos canales, tardará no menos de seis años para que los árboles tengan el tamaño suficiente como para servir de freno.
"Irrigación hace un trabajo excelente con la impermeabilización, pero es evidente que ha dejado de lado las medidas de prevención que eviten accidentes", comentó el diputado Alexander Maza, que pidió un informe al gobierno sobre ese punto. Y agregó: "Habría que poner junto a los canales algún tipo de guard-rail durante seis o siete años hasta que los álamos crezcan y sirvan de tope, pero no se ha hecho".
Uno de los tantos ejemplos ocurre en el cruce Tres Esquinas, una región rural que comunica zonas de San Martín, Junín y Rivadavia, donde las pocas barandas existentes son viejas, están oxidadas, rotas o directamente han desaparecido; también en el cruce de las calles Moyano y Cueva el escenario resulta peligroso, ya que nada impide que alguien pueda caer al agua y ser arrastrado por debajo del carril.
"Por este camino pasan muchos chicos que van a la escuela; gente en bicicleta y también vehículos", cuenta una vecina, y recuerda que hace sólo un mes, un auto no cayó "de milagro" al canal cuando quedó con sus ruedas delanteras en el aire.
Desde la Inspección del río Tunuyán Inferior explican que la impermeabilización de canales contempla obras de barreras aluvionales en los casos en que sean necesarias, pero admiten que la seguridad "es algo que tendremos que resolver entre la Inspección e Irrigación". También Vialidad tiene cartas en el asunto ya que son de su jurisdicción la mayoría de los caminos junto a los canales.
"Entiendo que es necesario rediseñar la seguridad de esos cauces y que el tema necesita de un estudio profundo de Vialidad", explicó el delegado en la zona Este, Omar Venegas, y prometió recorrer los puntos más peligrosos "para ver cómo resolvemos el problema".

Claves

Impermeabilización. A partir de inversiones millonarias, Irrigación ha optimizado notablemente el uso del agua de riego, a lo largo de centenares de kilómetros de cauce en todo el Este.

Peligro. Resulta llamativo que en obras que superan los 30 y hasta 40 millones de pesos, no se haya contemplado la instalación de barandas o barreras metálicas en los lugares más transitados.

Accidentes. Debido a estas falencias no son raras las caídas a los canales de personas que viajan a pie, en bicicleta o en vehículos; afortunadamente la mayoría de estos accidentes no son fatales por lo que no llegan a trascender.

Irrigación. Desde la Inspección del río Tunuyán Inferior admiten que las obras de impermeabilización incluyen barreras aluvionales, pero que poco se contempla el tema de la seguridad.