El defensor del Pueblo de la Provincia, Martín Díaz Achával, durante la jornada de ayer, hoy y mañana se encuentra participando de la reunión de la Asociación de Defensores del Pueblo de la República Argentina y también del Consejo de Defensores del Pueblo de la Cuenca Salí-Dulce, situación que será aprovechada para solicitar una audiencia con el secretario de Medio Ambiente de la Nación, Hormero Bibiloni, con el objetivo de plantear la problemática de contaminación en Las Termas de Río Hondo y el subsidio fiscal que recibirán empresas de Tucumán para la fabricación de alcohol.
Tras una comunicación con Nuevo Diario, el letrado explicó que “mantuvimos un diálogo informal con diversos defensores sobre estos temas. Pero la idea es que este pedido se formalice, de manera que sea el Consejo de Defensores de la Cuenca el que lo solicite” ante las autoridades correspondientes.
Según detalló, la mortandad reciente de peces en el lago de la ciudad termense y la creciente contaminación, por petitorio, serán incluidos hoy entre los ejes de debate de la reunión de la cual participa en Buenos Aires.
A través de esta acción, se solicitará la intervención del Estado Nacional en esta problemática, avalados por los correspondientes estudios que se están desarrollando desde la Provincia. “Lo que queremos es que se trate de impedir el subsidio a estas empresas tucumanas, porque el alcohol de esta forma estaría contaminando aún más a la ciudad”, concluyó Díaz Achával.

“Es por lo que no se ha hecho”
La reciente problemática de contaminación que se está viviendo en Las Termas de Río Hondo preocupa a una gran cantidad de ambientalistas, quienes opinan que “todo esto es la consecuencia de lo que no se ha hecho”.
Norberto Costas manifestó en diálogo con Nuevo Diario que la provincia de Tucumán, “en vez de acogerse a la Ley nacional 24.051 de Residuos Peligrosos, lo hace a la del Ciprosa, que dictó una resolución, la 1665/03 que permite tratar valores de contaminación a empresas que están radicadas en Tucumán, por muy encima de lo que marca la Ley 24.051”.
Según explicó, el grado de contaminación se puede medir porque “no es una sola empresa a la que se la beneficia, entonces los elementos contaminantes se tienen que multiplicar por 10, 20 ó 30 empresas”.
Por otra parte, destacó que esta consecuencia de hechos también involucra a la ciudad, debido a que “Las Termas, hace rato, le viene dando la espalda al lago y ésta no es una situación nueva. Así como en la ciudad de Buenos Aires, durante muchos años se vivió de espaldas al Río de la Plata, y luego se tomaron algunas medidas que calmaron un poco la contaminación existente, aquí hace años que las Las Termas vive de espaldas a su lago”. Por otra parte, Costas argumentó que “cantidades importantes de familias de Termas han vivido con el sustento de la venta de pescado” y “con esto, se modificó el estilo de vida de la población”.
Por último, el ambientalista consideró destacar el caso de Las Termas, como emblemático. Según indicó Costas, “tenemos papeleras, ingenios, citrícolas, fábricas de baterías, desechos cloacales que van derecho al río y como si fuera poco, también contaminación minera, porque la Alumbrera también se ajusta a las resoluciones vigentes, más precisamente a la Ciprosa y no a la 24.051”.