El Ayuntamiento de Barcelona ofrece durante este verano mediante una prueba piloto información sobre las características del agua de las playas obtenida a partir de imágenes fotográficas por satélite que monitorizan el litoral de la ciudad.
Estas fotografías permiten obtener información sobre aspectos físicos del agua del mar en determinados momentos del día, coincidiendo con el paso del satélite sobre la vertical del litoral catalán. Son datos que complementan los análisis químicos que periódicamente se realizan desde la Agència Catalana de l'Aigua y la Agència de Salut Pública de Barcelona.
Los tres parámetros que se pueden medir a partir de las imágenes del satélite son la transparencia, las concentraciones de partículas en suspensión y la clorofila. La transparencia de las aguas puede ser un indicador de los niveles de insolación en aguas profundas.
La falta de esta luz solar es un factor que ralentiza el crecimiento de las plantas acuáticas y la regeneración biológica en aguas poco profundas. En lo que se refiere a las partículas en suspensión, su presencia genera un aspecto turbio en el agua.
La concentración de clorofila es un indicador que permite el seguimiento de la población de fitoplacton y del estado de la salud del ecosistema marino. La monitorización de los tres parámetros no sustituirá la información obtenida del análisis de muestras del agua, que son los que posibilitan determinar si el agua es apta o no para el baño.