Una marcada crecida del Río de la Plata, provocada por un fuerte y persistente viento del sudeste, derivó en la inundación de amplias zonas del sur del conurbano.
La altura del río, que algunos lugares trepó por encima de los tres metros, provocó el anegamiento de calles y la evacuación de viviendas en localidades bonaerenses como Berisso, Ensenada, Magdalena, Quilmes y Avellaneda.
El gobernador Daniel Scioli monitoreó las acciones de atención a los municipios que realizaron diferentes reparticiones del gobierno provincial como consecuencia de la crecida del Río de la Plata, tras haber sobrevolado las zonas más afectadas.
"Instruí a la Secretaría General que se ponga rápidamente en contacto con los intendentes que pueden tener áreas más vulnerables para estar atentos a las necesidades que puedan tener los vecinos de estos lugares", señaló.
La crecida del Río de La Plata superó los 3 metros y rápidamente las autoridades dieron el alerta en las zonas costeras. Una de las más afectados fue la de Magdalena, lugar donde debieron ser evacuadas varias familias.
A su vez, desde Defensa Civil se instaló un sistema de alerta y emergencia en las localidades de Tigre y Quilmes, ante la posibilidad de tener que evacuar a los vecinos, pero desde el organismo se informó que la situación en la ribera quilmeña comenzó a normalizarse pasado el mediodía, cuando se atenuaron los vientos.
Según indicó esta tarde el responsable de Defensa Civil de Quilmes, Néstor Guglielmino, "se está normalizando la situación de la Ribera", tras la crecida del Río de la Plata que se produjo anoche a raíz de los fuertes vientos.
Por otra parte desde la Dirección de Prensa Municipio de Quilmes informó que el lanzamiento del Catamarán que unirá la mencionada localidad bonaerense y la Capital Federal, prevista para hoy, fue suspendido por las condiciones climáticas.
Cerca de 50 personas debieron ser evacuados en la ciudad de Ensenada a raíz de la crecida del Río de la Plata por la sudestada.
Así lo informó el director de Desarrollo Social de Ensenada, Carlos Bocay, quien explicó que "el río bajó en las últimas horas de 3,30 metros a 2,90 y hay esperanzas de que no vuelva a subir".
El funcionario explicó que "aproximadamente entre evacuados y vecinos autoevacuados hay alrededor de 50 personas, sin contar a la gente que vive en la Isla Maciel, donde aún no han podido llegar para brindar asistencia.
En ese sentido, Bocay aclaró que "en la Isla los vecinos viven en construcciones altas, no obstante ellos desde el municipio, buscan "llegar con mercadería y colchones para colaborar.