El gobernador Ricardo Colombi salió a defender ayer el proyecto Ayuí que pretende inundar 8 mil hectáreas para abastecer a las arroceras en la provincia, luego de que el canciller Héctor Timerman anunciara que el Ejecutivo nacional buscará frenar el proyecto con acciones legales.
Además, Colombi ratificó la posibilidad de que se instale en la provincia una papelera que vuelque sus desechos al río Paraná, en un contexto en el que la oposición provincial y entidades defensoras del medio ambiente comenzaron a cuestionarlo duramente por su posición frente a estos proyectos.
“Que la gente diga lo que quiera, nosotros vamos a seguir avanzando”, afirmó ayer el director de Recursos Forestales, Luis Mestres, en declaraciones a la prensa correntina luego de la conferencia de en la que Timerman adelantó que el Estado argentino no permitirá la construcción de la represa Ayuí.
Colombi elevó el tono de la polémica porque además defendió otra vez la posibilidad de que empresarios vinculados a Botnia construyan una papelera en tierra provincial.
“Corrientes no tiene ningún problema en que se instale una pastera porque queremos hacerlo, hay tecnología avanzada y si las cosas se hacen bien Corrientes no tiene problemas para instalar unas pastera”, insistió el mandatario.
El gobernador radical precisó que sus intenciones apuntan a que esa industria se ubique a orillas del Paraná, “entre las localidades de Ituzaingó y Villa Olivari, donde estamos exhibiendo un gran potencial forestal” para abastecerla de materia prima.
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