El Gobierno busca alternativas para evitar la desertificación de tierras productivas debido a los incendios forestales que afectan el país, para ello, se propone aplicar acciones concernientes a la reforestación y producción de nuevas especies que sean menos exigentes en requerimientos de nutritivos, según informó el director del Instituto Nacional de Innovación Agropecuaria y Forestal (INIAF), Celso Ayala.
Los incendios forestales ya muestran sus consecuencias inclusive a futuro, puesto que el Gobierno anunció ayer que los suelos de regiones donde se están registrando los focos de calor sufrirán la desertificación en un plazo de tres a cinco años, lo que causará un perjuicio para la agricultura y la ganadería.
El director del Instituto Nacional de Innovación Agropecuaria y Forestal (INIAF), Celso Ayala, informó que en los primeros años, la primera etapa de la producción puede tornarse fértil, sin embargo, dijo que después del tercer año estos suelos serán improductivos y no serán útiles para el pastoreo, lo que ocasionará el impedimento de poner nuevos cultivos.
“El proceso puede presentarse de manera rápida o puede ser muy lenta, pero cuando se aplican cultivos sobre terrenos que han sido incendiados, pueden presentarse estos problemas de desertificación que deben ser resueltos. Puede ocurrir en tres o cinco años”, sostuvo Ayala.
También, Ayala adelantó que este hecho tiene el riesgo de provocar que la gente busque nuevos espacios para mejorar su producción, teniendo en cuenta que los efectos repercutirán en la parte agrícola y también en la ganadera, porque al quemar los pastos para que haya un reverdecimiento de los mismos, es con el propósito de que sea aprovechado por el ganado pero para ello se deben dar alternativas y evitar la quema.
En ese sentido, una de las alternativas para evitar la desertificación de las tierras productivas es la aplicación de acciones adecuadas para la reforestación, como la producción de nuevas especies, cuyas exigencias sean menores en el requerimiento de nutritivos y que a su vez vayan a componer la masa y nutrientes perdidos por el suelo.
Para luchar contra estos efectos, esta dependencia gubernamental a través del Instituto Nacional de Innovación Agropecuaria y Forestal (INIAF), viene desarrollando nueve proyectos para evitar el daño a estas tierras productivas.
“La investigación se va a trabajar sobre temas para la reincorporación de nuevos tipos de producción pero ya con terrenos degradados que es un tema que hay que investigar”, dijo Ayala.