El escándalo por la venta de tierras en el territorio provincial sigue sumando datos llamativos y pone en evidencia el descontrol que existió durante muchos años en este tema. Desde la Fiscalía de Estado de la provincia confirmaron a NUEVA RIOJA que un privado es dueño de una porción de la Laguna Brava, en plena cordillera riojana.
La operación de compra de ese lugar turístico no está cuestionada ante la Justicia y se encuentra inscripta en los registros oficiales del Estado provincial, aunque actualmente es parte de un extenso proceso judicial por la quiebra de la empresa financiera que era dueña de las tierras.

Proceso
Según la información que manejan las áreas técnicas del Gobierno provincial, desde finales de la década del ‘70 una persona tomó posesión de esa porción de tierras.
Luego ese individuo, que sería un escribano de la Capital Federal, la vendió en el año 1986 a una empresa denominada "La Agrícola Compañía de Seguros".
Sin embargo, esa entidad financiera quiebra y se incluye al predio en el proceso que inician los acreedores de la entidad aseguradora.
De esta manera, actualmente una porción de La Laguna Brava es parte de un proceso judicial que no fue resuelto de manera definitiva por parte de la Justicia argentina.

Detalles
Desde la Fiscalía de Estado de la Provincia comentaron que el predio cuenta con información posesoria y que en principio no existirían los mismos problemas legales que en los casos de Valle Hermoso o algunos de las tierras de los distritos en la zona de Chilecito.
La porción de tierras que correspondería a un privado sería uno de los extremos de la Laguna y no incluiría ninguna hectárea correspondiente al espejo de agua, aclararon ante la consulta periodística.




Reserva

Desde el año 1980 la Laguna Brava es una reserva natural. "Para preservar a las comunidades de vicuñas y guanacos que, como consecuencia de la caza furtiva, estaban al borde de la desaparición", se precisa en la información turística que distribuye la Provincia a través de diferentes páginas en internet.

"No es contradictorio que esté en manos de un privado y que sea al mismo tiempo reserva natural. Porque la denominación de reserva natural lo que hace es colocar una serie de exigencias que los poseedores deben respetar. Por ejemplo, no se pueden instalar elementos que alteren el medio ambiente en esa zona", comentaron ante la consulta periodística desde la Casa de Gobierno provincial, en donde destacaron que en el caso de la Laguna Brava estas condiciones se están cumpliendo de manera exacta.