Aseguran que los malos olores son una constante todo el año, pero se vuelven insoportables en jornadas de altas temperaturas
Si bien el Villa Hermosa comenzó una etapa de desarrollo de obras impulsada por la Municipalidad, un sector del barrio está excluido y sus vecinos se sienten discriminados.
Según los vecinos, en el barrio se trabaja en las obras de desagüe cloacal y pavimento, pero los beneficios cubrirán únicamente a los que viven por la calle Libertad, Padre Grotti y Pantaleón Gómez hasta la altura de Muratalla.
"Estamos indignados y molestos porque nos tratan como vecinos de cuarta categoría, cuando en realidad pagamos los impuestos como barrio residencial. Esto quiere decir que los que vivimos desde la Muratalla hacia la zona de la barrera no tendremos, por ejemplo, el desagüe cloacal, un servicio indispensable para mejorar nuestra calidad de vida, y dejar de soportar los malos olores, que se vuelven insoportables en días de intenso calor", comentaron a La Mañana los indignados pobladores.
Hicieron notar que quedarán fuera de la obra de desagüe cloacal más de 80 familias, distribuidas en tres manzanas, comprendidas entre las calles Yunká, Libertad, Padre Grotti y Pantaleón Gómez, desde Muratalla hacia el fondo del barrio.
"El barrio siempre fue postergado y nos pusimos contentos cuando la Municipalidad llegó con sus máquinas, pero lamentablemente las obras no tienen una mirada integral. Ahora en habrá vecinos bendecidos y otros excluidos y condenados a la vida insalubre, experiencia que venimos soportando desde hace años pero a la que no queremos acostumbrarnos", agregaron.
En la esquina de Muratalla y Libertad, las máquinas de la Comuna dejaron al costado de la calle parte de las ramas y los desechos de los desagües, situación que también generó malestar.
"No sólo no vamos a recibir el beneficio de las obras; como si esto fuera poco, ahora nos convertimos en el basurero del barrio", agregaron.