La poca acumulación de nieve en la cordillera, que hasta el momento no supera los 40 centímetros -se necesita al menos un metro-, hace presagiar que el año hídrico en la provincia será muy malo y es por eso que el Departamento de Hidráulica ya tomó algunas medidas para regular los recursos con los que se cuenta: redujo el caudal en los canales de riego en un 25%, y de enviar en los años hídricos "buenos" 0,4 l/s por hectárea para esta época, ahora sólo distribuye a 0,3, según confirmaron ayer desde esa entidad.
En el sector productivo local están preocupados porque temen no poder cumplir con la demanda de agua que requieren algunos cultivos y fueron los ajeros los primeros en poner el grito en el cielo, porque aseguran que por esto ya se vieron obligados a sembrar un 15% menos y si los caudales siguen siendo bajos tendrán ajos de menor calibre, es decir más pequeños.
"Los productores sabíamos lo que se nos venía si había poca agua y muchos decidieron sembrar algunas hectáreas menos, porque no tiene sentido tener muchas hectáreas si después no hay la suficiente agua como para regarlas. Es muy preocupante porque veníamos de un año bueno", dijo Alfredo Figueroa de la Cámara de Ajeros de la provincia.
Por su lado, el titular de Hidráulica, Jorge Millón, confirmó que hasta que no se hagan mediciones para saber exactamente de cuánta agua se dispondrá para el próximo verano, se continuará enviando menos por los canales. "Ahora nos estamos manejando en los canales con 0,3 litros por segundo por hectárea. En años hídricos buenos suele ser más alto porque además permitimos el lavado de los suelos y la mayor irrigación para la colocación de abonos. Y por ejemplo en verano se ponen a disposición de los productores, por un tema referido a la evaporación; unos 0,8 l/s/h si todo anda bien, sino es un poco menos", dijo ayer.
Es que además de la poca nieve acumulada hasta ahora, se suma que sólo el dique de Ullum logró recuperar casi por completo en este invierno su cota óptima, sin embargo Los Caracoles ni siquiera está embalsando, cuestión que pone a Ullum como prácticamente única alternativa ante el mal año hídrico que pronostican que se avecina para la próxima temporada, dado que los meses más nevadores ya pasaron.
Hoy, si las condiciones climáticas en alta montaña son buenas, un helicóptero de la provincia con técnicos de la Secretaría de Recursos Hídricos, tomará la altura de nieve acumulada y la densidad de la misma. Luego del análisis de estos datos, y de acuerdo a lo que argumentó Jorge Millón, se tendría una mayor certeza de lo que pueden ser los volúmenes de agua y el pronóstico de derrame para el verano venidero.

Ajeros, los más perjudicados
Con los datos que se manejan hasta el momento, que hablan de un 15% menos de superficie de ajos sembradas en la provincia, sale a la luz un tema que empieza a preocupar y a mirar el futuro con cierta incertidumbre par el sector, porque ya el año anterior, y por otras razones -comerciales y desastres climáticos principalmente-, se había plantado un 30% menos.
Por su parte, Mario Coralli, de la Cámara de Frutas y Hortalizas de la provincia, dijo que "por ahora no tenemos ningún problema, habrá que ver qué sucede más adelante". Otra de las producciones que podrían sufrir con la reducción del volumen del agua para riego, son los viñateros, que por el momento prefieren ser cautos y esperar el pronóstico que brinde Hidráulica.