Escudriñando a través del umbral de la choza del jefe de la aldea de Chirifoyili, por entre un patio cubierto de enseres de barro y ollas de cerámica, parece que nada ha cambiado en esta aldea durante siglos.
Aunque de hecho, una cosa muy importante ha cambiado.
Una nueva iniciativa -parte de un proyecto de UNICEF de saneamiento total organizado por la comunidad- ha introducido recientemente las letrinas en la aldea, y por primera vez, las personas usan métodos para un saneamiento más seguro. En ésta y otras aldeas apartadas del norte de Ghana, las personas han practicado la defecación al aire libre en descampados a lo largo de la historia.

Soluciones nuevas para un problema antiguo
La defecación al aire libre presenta riesgos graves para la salud. Las comunidades que la practican están sometidas a un riesgo mayor de contraer enfermedades diarreicas, infestaciones helmínticas y hepatitis.
Sin embargo, hoy el saneamiento mejorado está en rápida expasión en Ghana. Entre 1990 y 2006, la tasa nacional de acceso a saneamiento mejorado ha aumentado del 6% al 10%.
Por medio del proyecto IWASH, UNICEF Ghana espera lograr que cada vez más aldeas abandonen la defecación al aire libre. Una de las primeras en obtener este preciado objetivo es Chirifoyili, situada en la región septentrional del país. En la actualidad, todos los integrantes de esta comunidad tienen acceso a letrinas o escusados levantados en el exterior sobre fosas sépticas seguras.
El jefe de la aldea de Chirifoyili, como suele ser habitual en estos casos, fue decisivo para reunir el apoyo de la comunidad para las nuevas letrinas. Tras esforzarse por educar a sus convecinos acerca de las beneficiosas ventajas de un saneamiento mejorado, ahora está enormemente orgulloso de la condición de Chirifoyili como una de las primeras aldeas del distrito que dispone de un método avanzado de eliminación de residuos.

La "excelente idea" gana popularidad
Pocas semanas antes, el coordinador de recursos del distrito, Issah-Bello, viajaba por una aldea vecina en su vehículo. Unos aldeanos lo detuvieron con curiosidad por saber qué hacía en su zona. Issah-Bello les mostró una grabación de vídeo que acaba de filmar en las letrinas de Chirifoyili. Al ver las imágenes de sus vecinos y sus eficaces letrinas, los aldeanos se sintieron motivados para construir las suyas.
"¿Cómo es posible que ellos lo hicieran y nosotros no podamos?" preguntó uno. "¡Si él puede construir una letrina yo también!"
Joesph Bnugaram posa de pie en frente de una letrina construida recientemente en su aldea, situada en una zona rural del norte de Ghana.
De manera que así se sembró la semilla del cambio.
Los aldeanos expresaron a Isaah-Bello su intención de construir también sus propias letrinas, y sin ninguna ayuda exterior. Para probarlo, le pidieron que regresara a la aldea en tres semanas.
Pasado ese tiempo, Issah-Bello regresó a la aldea vecina. Muchos hombres lo esperaban bajo un arbol cercano a la polvorienta carretera principal. A continuación, el dirigente de la comunidad, Joseph Bnugaram, le condujo orgulloso a las nuevas letrinas: unas pequeñas estructuras a base de barro con puertas a ambos lados. El lado de las mujeres quedaba diferenciado del de los hombres por una lámina de acero corrugado que cubría la entrada.
"No es sólo una buena idea, es una idea excelente", dijó Bnugaram. "Antes, pisabas los excrementos de alguien y las moscas te seguían". Según él, los beneficios en la salud de las nuevas letrinas también se han hecho evidentes: "los niños no han caído enfermos y ha puesto límite a la diarrea".

Progresos hacia los Objetivos de Desarrollo del Milenio
Esta innovación simple y segura fue construida por y para los aldeanos. Además de ser prácticas, las letrinas ayudarán a Ghana en la larga senda hacia la consecución de las metas de los Objetivos de Desarrollo del Milenio (ODM) vinculadas al agua potable y al saneamiento. Los ODM, un conjunto de metas reconocidas internacionalmente para la reducción de la pobreza en el mundo, instan a reducir a la mitad para 2015 la población mundial que carece de acceso a agua potable y saneamiento básico.
En Chirifoyili, el jefe de la aldea tiene un modo único para velar por el cumplimiento del uso de las letrinas: una amenaza de multa por importe de 3 cedis ghaneses, aproximadamente 2 dólares estadounidenses, para cualquier aldeano interceptado mientras defeca al aire libre.
La construcción de letrinas podría no parecer monumental, pero las ventajas para la salud obtenidas mediante la erradicación de la defecación al aire libre sí lo serán.
"Nos ha cambiado la vida", comentó el jefe. "Tendrá un efecto para toda la vida".