El Instituto Nacional de Investigación Agropecuaria ­INIA­ y el Banco Interamericano de Desarrollo ­BID­ suscribieron un convenio de cooperación técnica. El costo total de la operación es de un millón de dólares, U$S 504 mil provienen de fondos BID no reembolsables. El objetivo del programa es contribuir a la adaptación al cambio climático de los sistemas de producción agrícola actuales y en expansión, en la región del Cono Sur, a través de la identificación de vulnerabilidades y de medidas de adaptación. Para este fin, se realizarán estudios de caracterización de la expansión agrícola, de la vulnerabilidad de los sistemas frente a la variabilidad y el cambio climático y la identificación de medidas de adaptación en los sistemas agrícolas. Además de estudios sobre las bases regionales de información climática, se recurrirá a la información de 15 experimentos de largo plazo que existen en la región y que tienen entre 15 y 45 años de registros del comportamiento productivo de diversos sistemas de producción.
Uno de los objetivos del acuerdo firmado es el de alentar el desarrollo de propuestas características del Cono Sur que ha probado ser muy receptivo a los cambios tecnológicos y organizacionales. Evidencia de ello es la adopción generalizada de la siembra directa que ha llevado al Cono Sur a liderar las áreas de siembra sin laboreo, con registros que en poco más de 10 años superan el 80% de la superficie agrícola total, apunta un comunicado de INIA.

Ejecución
El proyecto será ejecutado por INIA Uruguay y contará con la participación de organismos co-ejecutores en países como México, Argentina, Chile, Paraguay, Bolivia y Brasil. Estos países se beneficiarán de los resultados de este proyecto a través de convenios de cooperación y programas conjuntos con el INIA. Las entidades participantes del consorcio presentado en el marco de la Convocatoria Extraordinaria 2008 del Fondo Regional de Tecnología Agropecuaria (Fontagro) son el INIA en Uruguay y el Instituto de Investigaciones Agropecuarias en Chile, el Instituto Nacional de Tecnología Agropecuaria (INTA) de Argentina, la Asociación Nacional de Productores de Oleaginosas y Trigo (Anapo) de Bolivia, La Dirección de Investigación Agrícola de Paraguay (DIA-MAG), la Confederación de Asociaciones Americanas para la Producción de la Agricultura Sustentable (Caapas), el Centro Internacional de Mejoramiento de Maíz y Trigo (Cimmyt), el International Research Institute for Climate and Society (IRI) y el Programa Cooperativo para el Desarrollo Tecnológico Agroalimentario y Agroindustrial del Cono Sur (Procisur).