La presidenta Cristina Fernández de Kirchner anunciaba esta tarde, desde la Casa Rosada, la firma del contrato con la concesionaria Hidrovía SA, para el inicio de las obras de dragado en el río Paraná, en el tramo comprendido entre Santa Fe y Confluencia, el punto de encuentro de los ríos Paraná y Paraguay.
Al mismo tiempo, en el Puerto de Santa Fe y en comunicación por videoconferencia, el secretario de Transporte de la Nación, Juan Pablo Schiavi, encabezará el acto de inauguración que dará comienzo a las tareas de dragado. Allí estarán los gobernadores de Santa Fe, Hermes Binner, de El Chaco, Jorge Capitanich, y de Entre Ríos, Sergio Urribarri.
Hidrovía SA, operada por la argentina Emepa y la belga Jan de Nul, tiene la concesión original de la vía fluvial entre Buenos Aires y Santa Fe. Pero en enero le fue extendida la operatoria aguas al norte de nuestra ciudad, en un curso que recorren barcazas y buques de menor porte que ahora tendrán mejores condiciones de navegabilidad, gracias al dragado a 10 pies y el balizamiento del tramo.
Las obras comprenden señalización, dragado y mantenimiento de la vía troncal desde el km 584 del río Paraná, tramo exterior de acceso al puerto de Santa Fe, hasta la altura del km 1238 del río Paraná. Son 654 kilómetros de la Hidrovía que serán beneficiados con los trabajos.
El Salón de las Mujeres del Bicentenario, en la Casa Rosada, será el escenario formal del anuncio. Pero los mandatarios provinciales junto a Schiavi y el subsecretario de Puertos y Vías Navegables, Ricardo Luján, recorrerán la zona fluvial desde la cabecera del dique 1 del puerto local.
A bordo del catamarán “Costa Litoral” estarán además el intendente de Santa Fe, ingeniero Mario Barletta, y el titular del Ente Administrador del Puerto, Marcelo Vorobiof.
Obra estratégica
El canal navegable tiene en la actualidad 34 pies entre Buenos Aires y Puerto San Martín, y 25 pies de allí a nuestra ciudad; pero se están llevando las profundidades navegables a 36 y 28 pies, respectivamente.
Con los 12 pies efectivos desde nuestra ciudad hacia el Norte, el futuro puerto de Santa Fe -cuando se concrete su traslado- será el punto de encuentro de transferencia de cargas que vendrán por barcazas desde el norte y los barcos que llegarán desde el sur.
Transferencias de cargas fluviales se sumarán a “Interland” propio de la estación fluvial multipropósito que propone la capital provincial. Eso supone más trabajo y desarrollo económico.
El emprendimiento del nuevo puerto santafesino prevé que el gobierno nacional, a través de la Subsecretaría de Puertos y Vías Navegables, aporte $ 57.750.000 (según decreto Nº 1801/2009) para obras viales de accesos.
Por su parte, la provincia contraerá un endeudamiento de hasta U$S 25 millones con el Fonplata y aportará otros U$S 15 millones propios. Se deberá sumar un aporte privado que completará el financiamiento requerido para la realización del proyecto definitivo, para lo cual se llamará a licitación internacional.
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boyas y balizas
habrá en el río de Santa Fe a Confluencia. Cada año se repondrán 30 % de los equipos
U$S 112,5 millones
Es el costo de la obra en los primeros tres años, durante los cuales no se cobrará peaje a las embarcaciones que transiten desde Santa Fe hasta Confluencia. El pago lo hará el Estado a razón de U$S 3.125.000 al mes; Hidrovía se hará cargo de 90 empleados de la Dirección de Vías Navegables. La tarea incluye llevar la vía navegable a 12 pies (con un ancho de solera de 104 metros); queda por definir un esquema que extienda la navegabilidad garantizada hasta Asunción e incluso más al norte.
Eficiencia
El transporte por vía fluvial representa un significativo ahorro, ya que representa la quinta parte del costo del transporte por camión. Eso supone más rentabilidad a los usuarios del sistema logístico, pero además representa un menor impacto ambiental y ahorro energético de gasoil. Por cada HP que tiene un motor, se mueven 150 kilos de carga en una ruta, 500 kilos en ferrocarril y hasta 4.000 kilos en el río.
El río en tiempo real
Se instalará una red de mareógrafos con 12 estaciones de medición automática y transmisión remota de datos sobre la altura del río, cada una de ellas con la correspondiente escala hidrométrica.
La tarea principal se realizará con una draga de succión en marcha de unos 2 mil metros cúbicos de cántara, preparada para trabajar sobre arenas gruesas consolidadas, según el detalle técnico ofrecido por la DNPVG.
El concesionario deberá asumir la total responsabilidad por los equipos para el dragado como para el resto de las tareas.
Además Hidrovía realizará relevamientos batimétricos de la vía navegable, con sondeos incluidos, para tener un “dibujo” transversal, de margen a margen, del tramo concesionado.