Las dos ciudades más grandes del interior –Río Cuarto y Villa María– vuelcan hoy sin tratamiento alguno los líquidos cloacales crudos a los ríos que las atraviesan. La contaminación que generan es evidente.
Río Cuarto vuelca 90 por ciento de sus efluentes sin tratar al río, porque la planta construida hace más de 50 años está colapsada hace tiempo.
La contaminación del río Cuarto y su ribera está probada por estudios de la UNRC, en un tramo de 18 kilómetros. En el municipio señalan que se necesitarían 70 millones de pesos para construir una planta depuradora y que no han tenido respuesta para ese financiamiento desde el Ente Nacional de Obras Hídricas y Saneamiento (Enohsa).
Villa María, en tanto, arroja desde hace unos 40 años todos sus desechos cloacales sin filtro al río. En 1968 salió de servicio la planta de tratamiento y desde entonces la ciudad contamina al río Ctalamochita (o Tercero). Pero el problema está a punto de ser solucionado: el 23 de octubre próximo es la fecha puesta para inaugurar la nueva planta, con una inversión de $ 42 millones aportados por el Enohsa.
Bell Ville era otra que arrojaba sin tratamiento sus líquidos cloacales al río Ctalamochita. Hasta que hace un año inauguró una primera laguna de una planta de depuración, y en los próximos habilitará la segunda, con las que tendrá capacidad de tratamiento para varias décadas.
En abril pasado, este diario reveló que la Municipalidad de Córdoba estaba arrojando líquidos cloacales con tratamiento mínimo al río Suquía, sin informar a los vecinos de la zona.

Colapsadas. Hay ciudades con sus plantas colapsadas, y mientras no cuenten con fondos para ampliarlas, no pueden sumar más redes y usuarios. Es el caso de Alta Gracia y Cruz del Eje.
Río Tercero tiene nueve lagunas, donde tras 30 días de depuración biológica, los líquidos ya tratados se vuelcan al río. El mayor problema son los malos olores.
Jesús María tiene un tratamiento similar, pero deberá ejecutar tareas de limpieza tras detectarse que los volcamientos al río presentan valores por encima de los permitidos.