Córdoba anda flojo en algunas estadísticas. No hay modo de saber con precisión, por ejemplo, qué porcentaje de la población tiene conexión a redes cloacales. Pero los datos existentes muestran que son menos de la mitad de los hogares.
El último dato oficial es del censo nacional 2001, que determinó que casi el 26 por ciento de los habitantes de esta provincia vivía, hace nueve años, en hogares conectados a una red pública. El resto tenía sus sanitarios que desagotaban a pozos ciegos, a la tierra a o cursos de agua o sin descarga.
Del censo provincial 2008 aún no se terminaron de contar estos datos. Y en la Subsecretaria de Recursos Hídricos de la Provincia no hay un relevamiento puntual al respecto.
En esta década, muchas localidades han logrado extender redes cloacales y otras han sumado ese servicio del que carecían. Pero una buena cantidad sigue sin tener ni un metro de cañería que ayude a mejorar las condiciones de saneamiento ambiental para sus habitantes y de evitar riesgos sanitarios y de contaminación de napas.
Un relevamiento que realizó este diario sobre las 12 principales ciudades del interior cordobés determinó que, en promedio, tienen cobertura de cloacas en un 52 por ciento.
Si a eso se le suma Córdoba capital, donde alrededor del 42 por ciento de las viviendas están conectadas a la red, se concluye que en las 13 ciudades donde vive el 60 por ciento de los cordobeses, sólo el 47 por ciento tiene este servicio disponible.
Restaría contar el otro 40 por ciento que habita en ciudades más chicas y pequeños pueblos. Aunque sin datos precisos, se estima que en la mayoría (al menos en los más chicos) no hay redes cloacales.
La estadística variará en pocos años, ya que varias localidades –incluida la capital cordobesa– están en obras para crear el servicio o extenderlo.

Las 12 más grandes. El relevamiento sobre las 12 ciudades más grandes del interior permite trazar un cuadro, en orden según su cantidad de habitantes:

Río Cuarto: tiene redes en un 85 por ciento de su superficie. Algunos barrios pendientes se sumarían en breve.

Villa María: un 80 por ciento está cubierta. Faltan siete barrios, con extensiones en marcha o proyectadas. El municipio asegura que a fines de 2011 rozaría el ciento por ciento. Hace 15 años tenía el 40 por ciento.

San Francisco: 53 por ciento de la ciudad tiene redes, y están en ejecución obras para sumar un par de barrios en breve.

Villa Carlos Paz: hasta 2003 no había servicio. Hoy cubre al 30 por ciento de la ciudad (están conectados cinco mil usuarios, sobre 20 mil propiedades).

Alta Gracia: 50 por ciento tiene disponible la prestación cloacal. No se pueden ampliar las redes porque la planta de tratamiento trabaja al límite.

Río Tercero: 92 por ciento de la zona urbana tiene redes. En usuarios, el 87 por ciento de las propiedades está conectada, lo que representa un 43 por ciento más que hace 10 años.

Bell Ville: 85 por ciento está cubierto, y en breve llegará al 88 por ciento por una extensión en ejecución.

Villa Dolores: no tiene el servicio, pero está a punto de lograrlo. El año pasado se iniciaron las obras que harán que este año las primeras 400 viviendas tengan conexión a cloacas. El resto deberá esperar otras etapas. Será la única localidad de Traslasierra con al menos un sector con servicio.

Jesús María: 90 por ciento de la ciudad tiene cobertura. En la última década se expandieron notoriamente las redes. Hace 15 años no tenía el servicio.

Cruz del Eje: 45 por ciento de la población tiene conexión. Pero no puede extenderse hasta tanto no se amplíe la colapsada planta de tratamiento.

La Calera: casi el 10 por ciento (sólo un barrio y un complejo habitacional) están conectados a una red. Están en marcha obras que sumarán en algunos meses un 20 por ciento más.

Villa Allende: no tiene cloacas, salvo en los countries de su jurisdicción que cuentan con tratamiento propio. El municipio espera fondos que gestiona para iniciar la obra. Con similar cuadro -sin cloacas y a la espera de recursos externos- están las vecinas Río Ceballos, Unquillo y Mendiolaza.