La segunda jornada de protesta de los ambientalistas de Gualeguaychú que rechazan la presencia de Botnia tuvo ayer una magra convocatoria, pese a los esfuerzos de los organizadores por demostrar que esta nueva embestida dispuesta tras el cese de la tregua podría generar un efecto similar al molesto corte de ruta que desplegaron durante más de tres años.
Después del primer regreso a Arroyo Verde, el domingo pasado, ayer sólo 30 vecinos se acercaron hasta la cabecera del puente General San Martín y protagonizaron primero una volanteada entre los automovilistas. Después movieron una decena de bancos de madera sobre la Ruta 136, simularon durante poco más de una hora un bloqueo del paso hacia Uruguay y desarrollaron la tradicional asamblea de todos los domingos, en la que definieron realizar una protesta en Buenos Aires y quizás hasta un escrache a Néstor Kirchner, si efectivamente el ex presidente cumple su promesa de visitar Gualeguaychú a fin de mes.
Esta medida se sostendrá durante todos los domingos de setiembre, aunque ya evalúan extenderla en el tiempo, lo que eventualmente podría complicar nuevamente el tránsito fronterizo, especialmente cuando se inicie la temporada turística. Sin embargo, la flaca convocatoria de ayer prueba que la sociedad entrerriana, que tanto ha hecho para demostrar que Botnia contamina, también parece haber comprendido que el corte de ruta es a esta altura un mecanismo de protesta agotado.
En simultáneo, avanza en la Justicia la causa iniciada por el Gobierno contra los ambientalistas que protagonizaron el histórico cierre del puente y se espera la audiencia convocada para el 15 de octubre próximo. Todo mientras se aguarda el primer proyecto de la comisión de científicos designados por ambos países para controlar a Botnia, plan que fue diseñado por los cancilleres Héctor Timerman y Luis Almagro a partir del acuerdo alcanzado entre los presidentes Cristina de Kirchner y José Mujica.
La imagen de ayer difiere de las concurridas manifestaciones en el paraje de Arroyo Verde cuando el conflicto se encontraba en el mayor pico de tensión.