"No queda prácticamente nada por hablar. Sólo resta escuchar a los especialistas, a la secretaría del Agua y del Ambiente y tratar de aportar nuestra experiencia de campo para que la ley se apruebe lo más rápido posible, incluso antes de que salga la nacional", dijo el funcionario, esta mañana, en diálogo con Radio Ancasti.
Para hoy está prevista una reunión, en la Cámara de Diputados, entre diversos actores involucrados en la discusión y elaboración de la Ley de Glaciares, la cual procura establecer zonas de protección ambiental. Ésta se presenta como una alternativa autóctona a la propuesta que, a nivel nacional, promueven los legisladores Daniel Filmus y Luis Bonasso las cuales, de prosperar, podrían establecer limitaciones a la actividad minera en Catamarca.
En senado nacional prevé tratar la versión del oficialista Daniel Filmus el próximo 30 de octubre, para cuando el gobierno provincial espera tener ya aprobada la ley local. "Ambas (propuestas, la de Filmus y la de Bonasso) tienen una debilidad importante, que es una improvisación en la elaboración del inventario. Se propone a Ianigla para que haga esta tarea, pero este organismo no tiene los recursos humanos necesarios para semejante empresa. Cuentan con 10 expertos y ahora han firmado un convenio con Mendoza para realizar un estudio que les demandará tres años, ¿qué pasará con las otras provincias?; para nosotros los tiempos son importantísimos", dijo Eremchuk.
No obstante, también se permitió considerar que, en ocasiones, la aprobación -o no- de una determinada legislación está más relacionadas a "juegos políticos" y, en este caso específico, es oportuno considerar el distanciamiento entre los gobiernos nacional y provincial. "Muchas veces estos son juegos políticos. En Catamarca se apoya a la minería y, de pronto, se generan estas legislaciones nacionales que si se las observa está muy claro que lo que se prohíbe es la minería. Lo demás se prohíbe sin decir nada, o se deja abierto a la buena voluntad de la autoridad de aplicación, que es la Nación", agregó.
Finalmente, el funcionario juzgó que la propuesta catamarqueña es mucho más profunda y amplia que las que se están debatiendo en el Congreso nacional, especialmente por la idoneidad en la especificación de parámetros, por ejemplo, para permitir la investigación de campo. "Nuestra ley va mucho más allá que la nacional y de las otras provinciales ya aprobadas, porque establecemos claramente que en las zonas afectadas se permitirá la investigación minera, con términos de referencia, protocolos y presupuestos mínimos específicos. Así, no cualquiera podrá venir a investigar como quiera. Los nuestros son términos mucho más severos y específicos que los establecidos en la ley nacional", concluyó.