Un sencillo pedido de informes sobre las fallas que presenta la planta de tratamiento de líquidos cloacales y que realizó la concejal radical Mirta Arias, generó malestar y un clima tenso en el recinto del Concejo Deliberante durante la sesión de ayer. La edil recibió respuestas del secretario de Obras Públicas, César del Valle, quien se presentó a informar lo que sucedió desde la inauguración de la millonaria construcción.
Disgustado por las críticas que recibió la planta, Del Valle aseguró que las diferencias políticas eran el motor de las acusaciones efectuadas por el DPA y ARSA. "Todas las cosas que están diciendo son sin fundamento, por desconocimiento total. Esto es político. Técnicamente tenemos todo para demostrarles lo que quieran, pero no es un problema técnico, es un problema político", expresó.
Sin embargo Del Valle admitió que las pérdidas existen y las justificó con la idea de que "todo lo que es técnico puede fallar".
No tardó en pedir la palabra Marina Cepeda, cuasi vocera del Ejecutivo en el Deliberante, quien calificó a Arias como una "mini Miguel Saiz" y la acusó como una "oponente permanente a Roca". Si embargo, Arias insistió: en su interés por conocer "si la empresa va a seguir reparándola, si sigue la garantía o si se están pagando adicionales".