Desde las 10, en el séptimo piso del Palacio Municipal, las diferentes entidades de nuestra ciudad volverán a insistir en el reclamo para que Rafaela pueda tener un verano soportable en cuanto al abastecimiento de agua potable.
Será la primera reunión de la comisión ciudadana conformada hace ya algunas semanas, cuando visitaron nuestra ciudad los principales dirigentes tanto de Aguas Santafesinas SA (ASSA) como del Ente Regulador de Servicios Sanitarios (ENRESS).
Ambas entidades están nuevamente invitadas a participar, de la misma manera que la Defensoría del Pueblo, la Federación de Entidades Vecinales. Obviamente, participarán integrantes del Ejecutivo (quienes organizaron el encuentro) y del Concejo. Con respecto al Cuerpo Legislativo, los ediles decidieron ayer que la participación será personal, es decir, no habrá delegados del conjunto, sino que el que quiere participar podrá hacerlo a título personal.
En la agenda figura el comienzo de la delineación de algunas estrategias que permitan que la ciudadanía no sufra tanto los veranos. Algunas de ellas estarían dirigidas a evitar el derroche del agua, y otras, en cuanto a la toma de los reclamos.
Justamente, en este sentido, se adelantó que una de las cuestiones a plantear a los funcionarios del ENRESS es que el organismo mejore su presencia en la ciudad. Principalmente, le pedirán que, en lugar de dejar su camioneta quincenalmente frente a la Municipalidad, a la espera de los reclamos, recorran los barrios para llegar al lugar en donde suceden los problemas.
La propuesta que entregará hoy el Ejecutivo consiste en elaborar un cronograma de visitas, con la correspondiente publicidad previa, para que todos los vecinos en sus propios barrios puedan expresar sus quejas en torno al servicio del agua.
Además, se coordinará el funcionamiento de un servicio telefónico al cual se pueda recurrir en caso de emergencia, tal como se implementó durante el verano pasado.
Otros temas a abordar es la micromedición, que si bien está más avanzada que en otras localidades concesionadas, aún no supera el 40% de la población servida, así como también las posibles acciones legales a las bombas que coloquen los vecinos directamente a la red -disminuyendo la presión a las casas vecinas- y no desde las cisternas al tanque, tal cual como está permitido.