La construcción de una planta de ósmosis inversa, cuyo proceso licitatorio avanzó al punto de estar cerca de ser adjudicada, mejorará sustancialmente la calidad del agua de red que se consume en esta ciudad al disminuir el actual contenido de arsénico, pero no aumentará la cantidad del suministro, por lo que no se asegura que no haya faltante de agua para este verano.
Por esa razón, el jefe del distrito local de la empresa Aguas Santafesinas, Oscar Comotto, apeló al "uso racional del agua", debido a que Cañada de Gómez posee un consumo elevado en la época estival y la instalación de medidores es escasa.
"Estamos ejecutando tres nuevas perforaciones en la zona rural a le vera del camino que circunda el aeroclub porque el nuevo proceso conlleva que cierto porcentaje sea descartado (hay que producir 140 metros cúbicos para que queden 100)", dijo Comotto dando a entender que la nueva producción irá a cubrir el porcentaje que será rechazado.
Los actuales niveles de arsénico están al límite de lo que exige el Código Alimentario Argentino. Comotto estimó que la baja será "sustancial", pero los porcentajes exactos se darán a conocer una vez que se practiquen diversas pruebas.
El responsable de la firma en Cañada de Gómez admitió que Assa tendrá que seguir trabajando en las campañas de concientización para llevar el mensaje de que "el recurso hay que cuidarlo porque sigue siendo escaso".

Adjudicación. La obra consiste en la instalación de dos módulos de 50 metros cúbicos cada uno que llevará adelante un tratamiento de 100 metros cúbicos por hora de agua. En al reciente licitación se presentaron cinco oferentes cuyas propuestas serán analizadas en la órbita del gobierno provincial.
La futura planta se montará dentro del predio donde actualmente funciona la cisterna (en la zona norte de Cañada de Gómez), debido a que quienes diseñaron el funcionamiento de esa dependencia previeron los espacios necesarios para que la planta de ósmosis se acople a la cisterna.
"Parte del agua que va a la red será procesada para luego ser volcada al resto del abastecimiento en su justa medida", confió a los medios locales, el jefe del distrito local de Aguas Santafesinas, Oscar Comotto.
Assa puso en marcha, a fines de 2008, un nuevo sistema de distribución de agua potable que mejoró sustancialmente el servicio que la empresa presta en esta ciudad. La obra demandó una inversión de 4,3 millones de pesos.