Al parecer, la vieja consigna de que todos los mendocinos paguen exactamente por el agua que consumen empezará a hacerse realidad una vez que Aysam (Agua y Saneamiento Mendoza) se ponga en marcha.
Dentro del plan de Mejoramiento Operativo, que el designado presidente, Rolando Baldasso, enviará próximamente a la Legislatura, la prioridad es recuperar e instalar, en una primera etapa, medidores en Guaymallén, Godoy Cruz y Luján, las áreas de mayor consumo detectado, lo que costará unos u$s 2 millones.
Pero se trata de un plan quinquenal, con un presupuesto total de u$s 10 millones hasta el 2015. El propósito declarado es que, al cabo de los cinco años, contemple las más de 350 mil cuentas que hasta ahora tiene la empresa en toda la provincia.
Actualmente, sólo un 5% de los usuarios pagan facturas con consumo medido. A partir de la privatización de OSM, según se informó, habían sido instalados alrededor de 100 mil; hoy muchos están obsoletos (su vida útil estimada es de diez años) y al menos 3 mil fueron robados.
El régimen tarifario vigente contempla, hasta aquí, que los medidores de caudales, cuyo costo ronda los $200 según el diámetro de la conexión, pueden instalarse a pedido de los usuarios. Estos pagan un cargo por traspaso que financia el valor.
Sin embargo, ahora se trata de un presupuesto superior, que aún así no descarta el aporte "voluntario" de los mismos clientes para llegar a habilitar unos 50 mil equipos en el lapso de un año.
El resto sería un mix entre subsidios que no se contemplen como "costo operativo", y sobre todo financiamiento externo: allí aparece el programa BID País como la fuente principal. "Es una de varias ventanillas que no se han utilizado para esto todavía, como también el Enohsa (Ente Nacional de Obras Hídricas de Saneamiento)", detalló Baldasso, respecto al organismo que solventa programas para operadores de comunidades de menos de 50 mil habitantes. Tambien está sujeto a que se modifique o no el cuadro tarifario.
Igual, por ahora la prioridad para Aysam es asegurarse el aval de la Legislatura para contar con $35 millones, proyectados en el manejo del servicio (operaciones, mantenimiento y obras) durante sus tres primeros meses de vida. No obstante, el presidente de la Comisión de Obras y Servicios Públicos del Senado, Víctor Salomone, anticipó que "acompañamos la conformación de Aysam, pero todo será relativo sin la medición. Coincidimos conceptualmente en que es necesario para una facturación fiel a la realidad".
Aunque ahora cobra fuerza como recurso para optimizar el servicio, la idea de generalizar la micromedición del consumo de agua se había expuesto en noviembre de 2009. Durante la intervención de OSM se había decidido que, para el caso de los clientes residenciales comprendidos en el sistema de facturación con Cuota Fija que derrocharan agua potable serían "traspasados". Ya en mayo, cuando el Gobierno empezó la ronda de consultas para reestatizar OSM, los intendentes de Las Heras y Luján consideraron "fundamental" la inversión en medidores.
Baldasso anticipó que la idea es poder arrancar con el plan desde fines de octubre o principios de noviembre. "Mendoza está en situación crítica de consumo, por lo que un sistema solidario se logra cuando empieza a medirse en las zonas de consumo presunto elevado. Tal vez no cambie la tarifa, pero modificará los montos facturados porque está claro que uno empieza a consumir menos cuando se mide".
Ese "consumo presunto elevado" se torna más relevante en Guaymallén, parte de Godoy Cruz, y los distritos lujaninos de La Puntilla y Chacras de Coria. La pregunta es ¿el plan, si prospera, reducirá el ajuste tarifario pretendido del 50%? Según el titular de Aysam, es un tema a discutir.

Así será Aysam
El capital accionario de Aysam se divide en dos: 90% en manos del Estado y 10% para los trabajadores; y a los miembros de la Comisión Fiscalizadora (sindicatura), que quedaron en tres, dos del Estado y uno por los empleados.
El límite máximo para la contratación de nuevo personal 3,13 empleados por cada mil cuentas.
El directorio de la incipiente empresa estará conformado por cinco miembros, 4 por el oficialismo y uno por los trabajadores. El tope máximo para sus salarios asciende al 95% del sueldo del gobernador.

También macromedición
Los técnicos los llaman "aforadores de reservas". Como sea, los macromedidores tambien están incluidos dentro del Plan de Mejoramiento Operativo, aunque a un costo mucho menor: u$s 800 mil. Sirven para precisar los caudales que salen de los acueductos hacia las planta potabilizadoras.
En el plan aparecen junto a una nueva actualización catastral, dentro del control de procesos. En números preliminares, la inversión se desdobla en dos etapas: la primera (2011-2012), de u$s 300 mil, para establecimientos del Gran Mendoza, como Luján I y II, Potrerillos y Benegas. Y la segunda, entre 2013-15, insumirá el resto en General Alvear, San Rafael.
Según los técnicos, para que el sistema medido asegure máxima eficiencia la macromedición es clave. E incluso los resultados de la auditoría hecha por la UTN lo recomiendan en pos del balance hídrico. "Hoy por hoy se estiman las pérdidas en la red, y hace falta precisarlas a ciencia cierta", explica el experto Darío Hernández.