Las provincias de Yacuma, Iténez y Mamoré del departamento del Beni registran altos niveles de contaminación, por efecto de las quemas y carecen también de agua, para el consumo humano, ante lo cual las autoridades declararon emergencia y buscan recursos para paliar los efectos de los chaqueos.
Reportes del Servicio Nacional de Meteorología e Hidrología (Senamhi) indican que sólo en los municipios de San Ramón, San Joaquín (Mamoré); Magdalena, Baures y Huacaraje (Iténez), se llegó al 90% de déficit de agua, a consecuencia de la sequía.
El responsable del Senamhi en Beni, Luís Philip, informó que en otras zonas se vive una situación de desastre, pero las tres provincias son las más afectadas. También se incrementaron los focos de calor, ocasionados por el chaqueo. “Se han intensificado los focos y tenemos problemas de contaminación, estamos cerca de 123 niveles o partes de un metro cúbico de oxigeno, eso significa que estamos intoxicados”, explicó.
Las autoridades departamentales mantienen la emergencia por la humareda y la sequía; gestionan recursos para proveer de agua a las familias afectadas por la contaminación de ríos a causa de las cenizas. “En estas zonas estamos con el problema de agua, no hay agua para el consumo de las personas. Hay posibilidades de precipitación de lluvias para el 25 de este mes, pero sólo habrán chubascos, esperamos que desaparezca la humareda”, dijo.
Philip explicó a la red Onda Local, que la densa humareda apenas deja una visibilidad de 300 metros por las mañanas, lo que imposibilita las operaciones aéreas en el aeropuerto de Trinidad, Jorge Henrrich. Sólo en las tardes desde las 15:00 horas la visibilidad se extiende a los 1.500 metros.
La Administración de Aeropuertos y Servicios Auxiliares a la Navegación Aérea (AASANA) informó el viernes que la humareda, provocada por los incendios forestales, principalmente en la región oriental, limita las operaciones de 21 aeropuertos, de los 37 que existen en el país.
La mayor concentración de humo se encuentra en las poblaciones de San Matías, Puerto Suárez, San Ignacio de Velasco, Concepción, San Javier, Ascensión de Guarayos y en el aeropuerto de Viru Viru, aunque ese aeródromo puede operar en condiciones extremas de visibilidad.
Las normas de la Dirección General de Aeronáutica Civil (DGAC) establecen que los aeropuertos no pueden operar si no tienen una visibilidad de al menos 5.000 metros.
Sin embargo, a pesar de las limitaciones de algunos aeropuertos, el personal de AASANA está disponible para atender el requerimiento de las tripulaciones que esperan el mejor momento para iniciar sus vuelos.