Una constante en el informe que elevó la perito María Luisa Genta a la Justicia provincial son las quejas por la negativa de la empresa que explota Pacará Pintado a brindar información sobre el funcionamiento de la planta de disposición final de los residuos. En rigor, Servicios y Construcciones La Banda SRL no supo precisar a la especialista cuántas toneladas diarias de basura recibe.
"La empresa no exhibió, durante la pericia técnica, documentación que acredite tal cantidad", advirtió la ingeniera química en el escrito de 58 páginas que remitió a los vocales de la sala II de la Cámara en lo Civil y Comercial Común, Carlos Miguel Ibáñez y Augusto Fernando Avila.
Los magistrados deben resolver un recurso de apelación deducido por la Federación de Organizaciones Ambientalistas No Gubernamentales de Tucumán. La entidad interpuso en diciembre de 2007 una acción de amparo colectivo y, en forma cautelar, reclamó el cierre de la planta, por considerar que contamina el medio ambiente, pero la medida fue rechazada el 10 de julio de 2008 por el extinto juez en lo Civil y Comercial de la III Nominación, Juan José Aráoz.
Tal como dio a conocer LA GACETA, el 27 de octubre de 2009 la ingeniera Genta concretó una inspección técnica en Pacará Pintado, en cumplimiento de lo dispuesto por los jueces. Precisamente, los resultados de los análisis tomados ese día por la perito son lapidarios: el centro de disposición final de los residuos urbanos sobrepasa los límites establecidos por las normas de calidad de vida en emisión de gases nocivos, a la vez que contamina el suelo, el agua de napas freáticas y el cauce del río Salí.
La perito cuestionó que, pese a contar con un plano indicativo de las curvas de nivel del terreno en el que se asienta la planta, ese bosquejo no pudo ser adjuntado al expediente judicial porque la empresa no hizo entrega del documento. "Con él se hubiera estudiado la ubicación de las celdas y su relación con las napas freáticas", ejemplificó Genta.
Aún más llamativo para la enviada de la Justicia fue que la empresa se haya negado a precisar la composición de la basura que recibe. "No exhibió documentación técnica alguna ni pudo dar datos referentes al control físico, químico y microbiológico que debe llevar diariamente una empresa industrial", señaló. Con idéntica actitud se topó, dijo, cuando preguntó en dónde desembocaban las cañerías que van por debajo del piso, y cuando intentó ahondar sobre la biodegradabilidad del lixiviado: "la empresa no posee laboratorio ni información del proceso".
Incluso, la postura de Servicios y Construcciones La Banda SRL mereció una consideración final en el informe judicial. "Debo dejar expresa constancia que la pericia se llevó a cabo sin contar con documentación relativa a la empresa que era de suma importancia para realizar el trabajo", advirtió Genta.
Los intendentes, responsables
"La situación de Pacará Pintado pone en evidencia la poca consideración que se tiene por la salud de los tucumanos y por el medio ambiente. La ausencia de políticas ambientales y el avasallamiento de las competencias municipales producen este tipo de crisis. Los gobiernos locales tienen la responsabilidad de lo que ocurre con la basura una vez que el vecino la deposita en la vía pública", advirtió el dirigente Pablo Berarducci (Por Yerba Buena). El referente opositor insistió en que los intendentes deben asumir su responsabilidad en la problemática de los residuos. "Esto supone la existencia de auténticos gobiernos municipales que estén preocupados por el bien común de los vecinos y no por agradar al gobernador de turno", consideró Berarducci.
La perito dijo que Pacará Pintado ocultó datos
La empresa no precisó qué cantidad de basura recibe, según la auxiliar judicial
Durante la inspección técnica dispuesta por la Justicia, la empresa que administra Pacará Pintado negó información clave para que la perito María Luisa Genta pudiera concretar su trabajo. Por ejemplo, Servicios y Construcciones La Banda SRL ni siquiera pudo precisar a la especialista cuántas toneladas diarias de residuos recibe la planta de disposición final.
Así lo expuso la ingeniera química en el informe que remitió a los vocales de la sala II de la Cámara en lo Civil y Comercial Común, Carlos Miguel Ibáñez y Augusto Fernando Avila. Tras la inspección, concretada el 27 de octubre de 2009, la perito concluyó que Pacará Pintado contamina el aire, el suelo, el agua y el cauce del río Salí. Sin embargo, la empresa impugnó el peritaje ante los jueces, por considerar que no condice con la realidad de la planta. Genta se quejó por la falta de predisposición de la empresa a colaborar con la Justicia.
Foto: Archivo Programa Infoambiente |
|
|