A menos de una semana de la última reunión de la comisión de Ambiente y Desarrollo Sustentable del Senado nacional, de donde surgió una tercera vía de negociación entre los proyectos parlamentarios sobre glaciares, el escenario en el Congreso dio un vuelco significativo y la votación de la norma, prevista en principio para el 30 de septiembre próximo, cosecha más indecisiones que apoyos hasta el momento.
Según un relevamiento que realizó DIARIO DE CUYO entre los 72 senadores nacionales, consultando a los propios legisladores, sus voceros y asesores, 37 son los que analizan sus decisiones, 28 -casi todos kirchneristas- apoyarían la posibilidad de unir las dos iniciativas -la de Daniel Filmus y la de Miguel Bonasso- y seleccionar de cada una de ellas lo más "negociable" en términos políticos, y sólo 7 senadores hasta ahora mantendrían su apoyo incondicional a la media sanción a favor del que impulsa Bonasso, aprobado en agosto en Diputados.
Con estos números, si a los 28 que están a favor de la tercera alternativa surgida ahora se suman al menos 9 del sector de los indecisos, estarían en la mitad más uno para lograr el objetivo que busca el Gobierno local.
Según informa en su edición digital el medio Parlamentario.com, estarían los votos para rechazar el proyecto de Bonasso, aunque no aclara si la alternativa es ir por la tercera vía que ha surgido ahora.
Son varios los factores que inciden es este escenario previo al tratamiento legislativo del documento: en primer lugar, si bien se trata de un mix de ambos proyectos que el Senado como cámara originaria estaría facultado a hacer por el artículo 177 del reglamento, los puntos que se sacarían o agregarían para el documento definitivo -sin modificar el texto de los mismos- aún no están claros y esto es lo que despierta la primera duda entre los senadores.
Es que la decisión política de quitar algunos artículos, tiene distinto peso e importancia según de cuál se trate, y a la vez genera respuestas muy diferenciadas en los legisladores; así las cosas, no será lo mismo "tocar" la definición de periglaciar que se amplió en el acuerdo con Bonasso (y restringió las actividades mineras, hidrocarburíferas e industriales en la zona) , que intentar volver a colocar a las provincias como dueñas de sus recursos naturales -esto se modificó y el último proyecto define a los glaciares como de carácter público- o darle únicamente al Ianiglia, el instituto nacional de glaciología, la autorización de emprender un inventario federal en sólo 180 días, o establecer que ningún emprendimiento nuevo se podrá concretar hasta que no finalice dicho registro oficial.
Lo anterior, sumado al discurso que dieron el martes pasado en el Palacio Legislativo los gobernadores José Luis Gioja (San Juan), Luis Beder Herrera (La Rioja), Walter Barrionuevo (Jujuy), y representantes de los Ejecutivos de Mendoza, Salta y Río Negro, cuyo denominador común se basó en las autonomías provinciales, suscitó distintos pareceres en los exponentes de la Cámara alta y generó que muchos senadores que estaban a favor de la ampliación del bien jurídico tutelado y la consecuente prohibición de la instalación y operación de la actividades mencionadas, ahora se enfoquen en otros artículos vinculados netamente con las provincias y es esto lo que indicaría la posibilidad de cambio en sus votaciones.
Un relevamiento anterior de este diario, publicado el 7 de septiembre pasado, arrojó 36 voluntades en contra del acuerdo Filmus-Bonasso, 30 a favor de ese convenio y 6 indecisos.
Pero ahora el panorama cambió.

La votación
El surgimiento de la tercera opción legislativa implicó que muchos de los senadores que antes apoyaban el acuerdo Filmus-Bonasso ahora manifiesten que no tienen una opinión formada sobre esta tercera vía. En consecuencia, sólo la mayoría del bloque oficialista, y gran parte del Peronismo Federal, según confirmó este medio, darían conformidad a la nueva negociación.
En tanto, otras fuerzas, como casi todos los integrantes de la UCR y demás partidos provinciales, hasta este fin de semana, estaban en pleno análisis sobre la votación que darían el jueves, y unos pocos exponentes del ARI, la Coalición Cívica y frentes como el Cívico de Córdoba, a modo de ejemplo, serían los únicos que sostendrían su posición inicial, a favor de la media sanción de Diputados.
En general, el bloque radical y sus aliados no son muy homogéneos en sus opiniones, es por eso que es muy probable que la postura que adoptarán dos de sus cabezas, el jujeño Gerardo Morales o el mendocino Ernesto Sanz (más cerca del Filmus-Bonasso) no sea la misma a la decisión que tomen los exponentes del Frente Cívico y Social de Catamarca, Blanca Monllau y Oscar Castillo, por representar a una provincia cordillerana y minera.
Por otro lado están los oficialistas indefinidos, como el misionero Luis Viana, los entrerrianos Blanca Osuna y Pedro Guastavino, los tucumanos Sergio Mansilla y Beatriz Rojkes de Alperovich.
Y si bien el Peronismo Federal, cuya cabeza la lleva el puntano Adolfo Rodríguez Saá, confirmó su adhesión como bloque a la tercera vía, la bonaerense Hilda González de Duhalde y el sanjuanino Roberto Basualdo están evaluando su inclinación con miras al jueves próximo.