Los habitantes de las Sierras Chicas tendrán desde ahora menos problemas con el suministro de agua potable. Ayer, finalmente quedó inaugurada la obra de ampliación de la planta potabilizadora de La Calera, que permitirá abastecer a cinco localidades del Gran Córdoba: además de La Calera, Saldán y Villa Allende proveerá ahora también a Unquillo y Mendiolaza. De este modo, el dique La Quebrada, que venía siendo insuficiente para la demanda regional, sólo abastecerá a Río Ceballos.
En un acto que debió hacerse bajo la lluvia, el gobernador Juan Schiaretti inauguró las obras de ampliación, que demandaron una inversión de la Provincia de 35 millones de pesos. Los trabajos permiten la interconexión de los sistemas del dique San Roque y La Quebrada.
La obra consistió en la construcción de una nueva cámara de carga y canaleta de entrada para aumentar la capacidad de conducción y aforo y la modificación de tres decantadores.
Para obtener un caudal mayor de agua a distribuir se construyó además una nueva batería de filtros rápidos a gravedad conformada por ocho unidades de filtración de manto de arena. También se sumó un tanque de compensación, un concentrador de lodos y una cámara para su posterior transporte y disposición final.
El sistema cuenta ahora con una cisterna de 10 millones de litros de agua potabilizada. Además se realizó el reemplazo de los caños colectores y de todas las válvulas de cierre y regulación de caudales.
En el acto de ayer estuvieron presentes además los intendentes de La Calera, Villa Allende, Mendiolaza y Río Ceballos.
Daniel Salibi, intendente de Mendiolaza resaltó la importancia de la obra para toda esta región, que habitan casi 150 mil habitantes, y adelantó que para evitar futuros cortes de agua cada localidad construirá nuevas cisternas.
Hasta ahora, el dique La Quebrada abastecía a Río Ceballos, Unquillo y Mendiolaza. En los últimos años, por el crecimiento de la demanda, resultaba insuficiente y la crisis hídrica del último verano agudizó notoriamente los problemas.