El sistema de la ONU se ha movilizado para responder a la nueva emergencia en Haití, suscitada tras la tormenta del pasado 24 de septiembre, que dejó al menos cinco muertos y más de 50 heridos, además de numerosos damnificados.
El Secretario General de Naciones Unidas, Ban Ki-moon, informó que se han desplegado más de 40 equipos de los organismos de la ONU y otras agencias humanitarias que, en coordinación con el gobierno de Haití, evalúan los daños y necesidades más urgentes en medio de las lluvias que, según los meteorólogos, continuarán durante los próximos días.
Por su parte, las fuerzas de la Misión de Asistencia de la ONU en el país caribeño (MINUSTAH) brindan asistencia médica y realizan trabajos de rescate entre la población que quedó atrapada en Puerto Príncipe como resultado de las lluvias torrenciales.
Asimismo, los organismos que operan en el terreno distribuyen entre los siniestrados bienes básicos que incluyen víveres, bidones, mantas y estuches de higiene.
Tras la nueva emergencia, Ban recordó a la comunidad internacional de donantes que el llamamiento humanitario para asistir a la población en Haití aún afronta un déficit de 450 millones de dólares, por lo que les pidió mostrar generosidad, como lo han hecho con las diferentes crisis registradas este año.