“Estábamos todos durmiendo y lo único que escuchamos fue unruido muy fuerte, y pues salimos de la casa y vimos que el cerro sehabía caído’’, dijo Donato Vargas, secretario del Comisariado de Bienes Comunales de Santa María Tlahuitoltepec, en el sureño Estado de Oaxaca, donde un alud arrasó unas 300 casas dejando hasta el momento al menos 8 muertos y medio millar de desaparecido s. Las fuertes lluvias registradas las últimas semanas y la precariedad de las viviendas hicieron el resto.
“Por la hora en la madrugada (la gente) se encontraba durmiendo y eso puede ser fatal”, dijo el director de Protección Civil de Oaxaca, Carlos Ramos Aragón, a la emisora Formato 21 .
Santa María Tlahuitoltepec se encuentra a unos 2.600 metros de altura ubicada en un pequeño valle que está rodeado de montañas y según informaron las autoridades cuenta con una población de 9.000 personas . Es una zona de indígenas Mixes que se dedican al cultivo y muchos de los cuales no hablen en español.
El pueblo y Villa Hidalgo –en donde otro deslave provocó un muerto– se localizan en la región de la sierra norte de Oaxaca, a unos 220 kilómetros al sureste de la capital mexicana y a dos horas de la capital del Estado.
El presidente de la Cruz Roja Mexicana, Daniel Goñi, explicó que la zona se enfrentaba un “desastre mayor”.
“Se calcula que cuanto menos hay alrededor de mil fallecidos y un número importante de damnificados, algunos lesionados, otros en la parte material. Es casi como determinar la erupción de un nuevo volcán”, indicó. Goñi aclaró que la cifra de posibles víctimas mortales era un escenario basado únicamente en la cantidad de viviendas afectadas, entre cien y trescientas, no en muertes confirmadas aún.
“Hasta no tener cuerpos a la vista no se puede determinar que ha fallecido pero al estar cubierto por un alud de lodo y tierra, la posibilidad de que haya muertos es inmensamente grande”, señaló.
Miembros de la Cruz Roja se encuentran en Oaxaca y se han enviado refuerzos para que coordinen con otras organizaciones de rescatistas las labores de rescate.
El presidente de México, Felipe Calderón, ofreció a las autoridades locales de Santa María Tlahuitoltepec, “toda la ayuda del Gobierno federal” para hacer frente a la tragedia, y expresó en un mensaje su solidaridad con todos los afectados.
Vecinos de Santa María Tlahuitoltepec buscaban con sus manos sobrevivientes entre los escombros en este poblado indígena, incomunicado por derrumbes que han bloqueado la única carretera de acceso. Debido a la persistente llovizna y espesa neblina, los helicópteros tampoco han podido llegar a este poblado localizado a 130 km del noreste de Oaxaca.
“Han llegado habitantes de poblados cercanos y escarban, muchos con sus manos, tratando de llegar a las viviendas”, dijo a la agencia AFP vía telefónica satelital, única forma de comunicación, Donato Vargas.
El gobierno mexicano, que califica la actual como la temporada más fuerte de lluvias desde que hay registro, señala que las precipitaciones han dejado desde mediados de mayo más de 80 muertos, unos 810.000 damnificados y pérdidas cercanas a los 4.000 millones de dólares.
El gobernador de Oaxaca, Ulises Ruiz, quien viaja hacia la zona, declaró al mediodía local a la prensa que ante la imposibilidad de llegar por vía aérea al lugar se traslada por carretera y que espera ba poder llegar. Dijo que la única información de víctimas que le han dado indica que hasta las primeras horas de la mañana había ocho muertos y unos 100 desaparecidos. Y sostuvo que la comunicación con el lugar del derrumbe es prácticamente nula y que la lluvia que aún afecta a la zona impide que los helicópteros puedan aterrizar.
|
|
|